El número dos del gremio de Camioneros, Pablo Moyano, acusó al Gobierno de Mauricio Macri de haber iniciado una “persecución” contra los sindicalistas que se oponen a las medidas que impulsa Cambiemos.
Tras la imputación de él y su padre, Hugo Moyano, el sindicalista sostuvo que la decisión de la Justicia de avanzar en las causas contra su familia es parte de un plan para “desprestigiar” a los que se opusieron a la reforma laboral del macrismo.
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“Ojalá que reaccionen los demás. Nosotros siempre estuvimos del lado de los trabajadores. El Gobierno y los empresarios no se bancan no poder avanzar contra los trabajadores”, afirmó Pablo Moyano en diálogo con radio 10.
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La fiscal de Lomas de Zamora, Viviana Giorgila, imputó ayer a los Moyano -presidente y vicepresidente de Independiente- en la causa en la que se investiga al ex directivo de la entidad, Noray Nakis y barras del club como presuntos miembros de una asociación ilícita que habría extorsionado a jugadores y directores técnicos del club.
Tras conocerse la noticia, Juan Carlos Schmid, uno de los miembros del triunvirato que conduce la CGT, volvió a denunciar que desde el gobierno nacional y de distintos “factores de poder” hay una intención de “acorralar” y “poner de rodillas” a los sindicalistas.
Además, negó que los casos de corrupción por los que fueron detenidos algunos dirigentes sean representativos de toda la estructura gremial. “Se trata de un porcentaje mínimo. Hay tres mil sindicatos, miles de delegados y no llegamos a una docena” de denunciados, argumentó.
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