En medio de cierta intranquilidad cambiaria, el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, intentó calmar a los mercados anticipando detalles del nuevo acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI). Falta que lo apruebe el directorio, pero el préstamo sería de 20 mil millones de dólares para Argentina. Lo que no contó.
Los dichos de Caputo no tardaron en repercutir en la escena política y económica del país. Sin embargo, lejos de ofrecer previsibilidad, como pretendía, el ministro libertario abrió nuevas interrogantes. La gerencia de estudios económicos del Banco Provincia enunció cuatro que son trascendentales.
- ¿Qué plazos tendrán los desembolsos?
- ¿Qué restricciones tendrá el Banco Central para intervenir en el mercado oficial y en el paralelo?
- ¿Qué pasará con la brecha si se elimina el dólar blend?
- ¿Cómo se financiará el déficit de cuenta corriente?
En su exposición, Caputo se limitó a decir el monto y luego se amparó en la “confidencialidad” para no revelar más detalles. Sin embargo, concluyó que gracias a este préstamo y a otros acuerdos que firmarían con otros organismos multilaterales, las reservas brutas del Banco Central llegarían a los 50 mil millones de dólares.
Según el estudio del Banco Provincia esos números no cierran. “Sumando los 20 mil millones de dólares anunciados, las reservas sin encajes por depósitos privados ni swap quedarían en 23,7 mil millones de dólares“. Se trata de una cifra cercana a los pagos de deuda que debe afrontar el sector público nacional en los próximos doce meses (USD 24,7 MM).
Así las cosas, las reservas del BCRA no aumentarían sino que incluso bajarían en mil millones de dólares más. En este escenario, será clave el rol de los acuerdos mencionados por Caputo que firmarían con el BID, la CAF y el Banco Mundial.