Con la llegada de los días más cálidos, muchas personas notan que las hormigas aparecen de golpe en la cocina. De un día para otro, se forman filas diminutas cerca del azúcar, las frutas o cualquier resto de comida. No es casual: el calor activa su búsqueda de alimento y convierte a los hogares en un lugar ideal si encuentran migas, humedad o accesos fáciles.
¿Por qué aparecen más hormigas en primavera y verano?
El calor acelera el ciclo de vida de las hormigas y aumenta su actividad diaria. En esta época salen en mayor número en busca de alimento y agua, y los hogares se convierten en un lugar ideal si encuentran restos de comida, humedad o superficies sin limpiar.
Además, suelen ingresar por rendijas, grietas, marcos de ventanas, zócalos o debajo de las puertas, siguiendo rastros químicos que dejan otras hormigas de la colonia.
Las hormigas pequeñas más comunes en las casas
En la mayoría de los casos, las que aparecen en cocinas y departamentos son hormigas faraón o también conocidads como hormigas argentinas, dos especies muy adaptadas a los ambientes interiores.
¿Qué son las hormigas faraón?
- Son muy pequeñas, miden entre 1,5 y 2 milímetros.
- Tienen un color amarillo claro o marrón rojizo.
- Su nombre proviene de una antigua creencia que las asociaba a las plagas del Egipto antiguo.
- Son comunes en casas y departamentos, sobre todo en cocinas y baños.
- Forman colonias grandes, lo que dificulta erradicarlas si se instalan.
Estas hormigas se sienten especialmente atraídas por azúcares, grasas y proteínas, como migas de pan, frutas, restos de comida o comida para mascotas.

Cómo combatir las hormigas pequeñas con métodos naturales
Antes de recurrir a insecticidas, existen soluciones caseras y naturales que pueden ayudar a alejarlas o reducir su presencia, especialmente cuando la invasión recién empieza.
1. Vinagre blanco con agua
Es uno de los métodos más efectivos.
- Mezclá partes iguales de vinagre blanco y agua en un rociador.
- Limpiá mesadas, pisos, bordes de ventanas y zonas por donde entran.
- El vinagre elimina el rastro de feromonas que usan las hormigas para orientarse.
2. Bicarbonato de sodio y azúcar
Una combinación simple y muy usada.
- Mezclá una parte de bicarbonato y una de azúcar.
- Colocá pequeñas cantidades en tapas de botella o recipientes bajos cerca de donde circulan.
- El azúcar las atrae y el bicarbonato interfiere en su sistema digestivo.
3. Limón o cáscaras de limón
El ácido cítrico también rompe los rastros químicos.
- Pasá jugo de limón por superficies y entradas.
- También podés dejar cáscaras de limón cerca de grietas o ventanas.
4. Canela, clavo de olor o laurel
El aroma es la clave para combatir a las hormigas.
- Funcionan como repelentes naturales por su aroma intenso.
- Podés colocar ramitas, hojas o polvo en alacenas, rincones o cerca de alimentos.
5. Tierra de diatomeas (grado alimenticio)
Una opción comercial sin químicos
- Es un polvo natural que no es tóxico para personas ni mascotas.
- Actúa deshidratando a las hormigas al contacto.
- Espolvoreala en grietas, zócalos o puntos de ingreso.
Extra: consejos preventivos
- Limpiá restos de comida inmediatamente.
- Guardá los alimentos en envases herméticos.
- Sellá grietas o rendijas por donde puedan entrar.
- No dejes platos sucios ni esponjas húmedas durante la noche.
Si la colonia ya está instalada o la presencia de hormigas persiste, puede ser necesario recurrir a control profesional de plagas.

