El brutal recorte de fondos previstos para el área de discapacidad dispuesto por el gobierno nacional de Javier Milei no solo impacta en las familias. También pega en las 188 escuelas privadas de educación especial que funcionan en la provincia de Buenos Aires. Advierten que están “al borde del cierre” y preparan medidas de salvataje.
Así lo informó Alberto Sileoni, el director general de Cultura y Educación bonaerense, en conferencia de prensa. Según el funcionario, “hay muchas escuelas privadas que están con dificultades“, especialmente aquellas que se dedican a niños y niñas con discapacidades. Sileoni contó que “están en una situación al borde del cierre” y anunció la puesta en marcha de “nuevas subvenciones” para auxiliarlas.
El subsecretario de Educación, Pablo Urquiza, precisó que de las 188 instituciones hay 128 que ya reciben asistencia económica de la Provincia. Sin embargo, la preocupación existe entre las autoridades porque “la matrícula de nuestras escuelas especiales está saturada” lo que implica que el sistema público no puede absorver a los chicos provenientes de escuelas que dejan de funcionar.
En este punto, el funcionario dio a conocer un dato inédito en el sistema educativo bonaerense: en lo que va del año unos 17.000 se pasaron de escuelas privadas a escuelas estatales. Urquiza explicó este fenómeno con la crisis económica, pero marcando que “ni aún en la crisis del 2001 hubo migración de la escuela privada a la de gestión estatal“.
Volviendo a las instituciones especializadas en discapacidades, Urquiza confirmó que están “incrementando las subvenciones de algunos cargos en las escuelas especiales” para mitigar la crisis que las aqueja. Según el funcionario bonaerense, los problemas económicos empezaron porque la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) recortó las pensiones y continuaron con la caída de los aportes que hacen las obras sociales. Se trata del organismo público que dirigía Diego Spagnuolo y que hoy está envuelto en un millonario escándalo de corrupción.