El juez federal Alejo Ramos Padilla, con competencia electoral en la provincia de Buenos Aires, habló por primera vez tras la decisión de rechazar el pedido de La Libertad Avanza (LLA) para reimprimir las boletas luego de la renuncia de José Luis Espert y otros candidatos de esa fuerza.
“La principal preocupación que teníamos era garantizar que se realicen las elecciones del 26 de octubre”, afirmó Ramos Padilla en diálogo con María O’Donnell. El magistrado explicó que la presentación del oficialismo se hizo el lunes 7 por la noche, apenas tres semanas antes de los comicios, cuando ya se habían impreso, revisado y embalado más de 15 millones de boletas únicas.
“Era material, temporal y jurídicamente inviable”
Ramos Padilla detalló que el martes siguiente se convocó a una audiencia con todas las fuerzas políticas, el Ministerio del Interior y el Correo Argentino. Allí, todos los partidos coincidieron en que el pedido era técnicamente imposible de cumplir. El juez contó además que el plan alternativo que había propuesto el Gobierno, con seis imprentas trabajando de manera simultánea y “un plan de entrega que comenzaba eventualmente a partir del día 15, si hoy ya teníamos una lista conformada y la posibilidad de modificar las fotos”.
“Hoy ni siquiera hay una lista firme de La Libertad Avanza, así que era logísticamente imposible que las imprentas pudieran producir 3 millones de boletas para el día 15 y así sucesivamente ir entregando 3 millones todos los días y nosotros el día 16 comenzar la distribución entre la provincia de Buenos Aires.”, remarcó.
“Hay razones jurídicas, presupuestarias, de igualdad y de transparencia, pero la primera razón para poder discutir las otras es si realmente se puede. Y no se puede”, sintetizó. La Junta —recordó— basó su decisión en antecedentes nacionales e internacionales que muestran que la prioridad debe ser la realización de los comicios.
“Ni siquiera, aunque uno tuviera la mejor voluntad, en esta instancia del proceso es posible modificar el instrumento de votación que ya llegó al juzgado, ya llegó a la junta electoral, está siendo revisado y está siendo embalado para que la gente pueda expresar su voto el día 26 de octubre”. Ramos Padilla remarcó que la principal preocupación era que no se suspendieran las elecciones por problemas del instrumento de votación.
Primera elección bonaerense con boleta única
De cara al 26 de octubre, el magistrado destacó que se pondrá en marcha por primera vez el sistema de Boleta Única de Papel (BUP) en la provincia de Buenos Aires, lo que implicó una enorme inversión logística. Asimismo detalló que los juzgados federales ya realizan capacitaciones en los 135 municipios.
“El presidente de mesa les va a dar el marcador para marcar la boleta. Puede ser una cruz, un tilde o cualquier marca que exprese claramente el voto. Estamos trabajando para que la gente se sienta tranquila al momento de votar”, explicó.
Además, valoró que el debate generado por el reclamo de LLA sirvió para dar más difusión al nuevo instrumento de votación y que la ciudadanía se familiarice con su uso. “Estamos trabajando para que la gente se sienta tranquila al momento de votar y para garantizar que todos los bonaerenses puedan hacerlo con seguridad y transparencia”, concluyó.