En la Legislatura bonaerense empieza a resonar un debate ya instalado a nivel nacional y que se vincula a la baja de la edad de imputabilidad, establecida hoy en 16 años, con propuestas de llevarla a 14 o incluso 13 años.
Esta vez el bloque UCR – Cambio Federal planteó el reclamo, dentro de lo que consideran la necesidad de una reforma “urgente del sistema penal”.
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Quien lo impulsó fue la senadora Flavia Delmonte, de la quinta sección, quien consideró razonable modificar la edad de imputabilidad. Le puso dos condiciones al debate: que se haga con “con seriedad y sin soluciones simplistas” y que debe hacerse “antes de que la situación se vuelva insostenible”.
Delmonte rechazó en ese aspecto el proyecto del Poder Ejecutivo nacional -impulsado por Patricia Bullrich- que propone un nuevo régimen penal juvenil, advirtiendo que el mismo “no solucionará la creciente inseguridad” y que “propuestas simplistas que sugieren que una ley puede resolver un problema estructural son inadecuadas”.
Baja de imputabilidad: el contexto
Por otro lado, recalcó que “la violencia diaria refleja un aumento de la delincuencia en áreas marginales con falta de oportunidades, educación y contención” y detalló que América Latina y el Caribe, con el 8% de la población mundial, concentran el 33% de los homicidios globales.
Como respuesta a esta problemática, Delmonte se refirió a la imputabilidad, definida como la capacidad psíquica de una persona de comprender la antijuricidad de su conducta y ajustar su comportamiento a esa comprensión, y planteó que “modificar esta edad es razonable”, pero que debe hacerse “con seriedad y sin soluciones simplistas”.
“¿A qué edad una persona es consciente de que su acción es ilegal y que puede recibir una pena por realizarla?”, se preguntó la legisladora, y continuó: “No es una respuesta sencilla, pero en nuestro país es a los 16, una de las más altas del mundo, cuando en otros países varía entre 12 y 14, e incluso es tan baja como 7 en Irlanda o 10 en Inglaterra y Surinam”.
A su vez, consideró incorrecto que un joven de 13 años reciba una pena de adulto debido a que el sistema carcelario de Argentina está en crisis, con sobrepoblación, hacinamiento y corrupción, y enfatizó: “Las altas tasas de reincidencia demuestran que el sistema no resocializa y que muchos internos se convierten en profesionales del delito”.
Finalmente, planteó como fundamental “abordar este problema con consenso político, seriedad y trabajo” y debatir la modificación y actualización del fuero de responsabilidad penal juvenil en Buenos Aires “promoviendo la reinserción social de los jóvenes con educación y herramientas para el mundo laboral”.
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