La tranquilidad de Barrio Parque se vio interrumpida por un asalto que tuvo como víctima a Pampita Ardohain. Delincuentes ingresaron a su vivienda y permanecieron allí durante seis horas, desvalijando cada rincón mientras la modelo estaba fuera del país por compromisos laborales.
El episodio generó un fuerte impacto en la zona, ya que se trata de uno de los barrios más custodiados de la Ciudad de Buenos Aires. Pese a ello, la banda logró llevarse objetos de valor y pertenencias personales.
El gesto de Roberto García Moritán
En medio de la conmoción, un detalle no pasó desapercibido. Roberto García Moritán, exmarido de Pampita y padre de su hija menor, se acercó de inmediato a la casa al conocerse la noticia. Según relató Fernando Burlando en el programa DDM (América TV), el economista acompañó la búsqueda de cámaras de seguridad en el vecindario y se puso a disposición de la investigación.
Consultado por Teleshow, García Moritán señaló:
“Lo positivo es que no había nadie en la casa. Bauti podría haber estado perfectamente y gracias a Dios no estaba”.
Los recuerdos de Blanca, lo más doloroso
Más allá del robo material, lo que más angustió a Pampita fue la pérdida de tres teléfonos donde conservaba fotos y videos de su hija Blanca, fallecida en 2012. Afortunadamente, esos dispositivos aparecieron horas más tarde en Lanús, cuando un chofer de aplicación encontró la caja de seguridad y varios objetos descartados en la vía pública.
El hallazgo permitió que la modelo recuperara parte del contenido personal de máximo valor afectivo, aunque la caja fuerte ya no estaba en el lugar.
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Las hipótesis de la investigación
Según trascendió, los delincuentes intentaron abrir la caja fuerte dentro de la casa, pero al no lograrlo se la llevaron. Al descubrir que no contenía dinero ni joyas de gran valor, descartaron los teléfonos y estuches en la calle. La Justicia investiga si hubo colaboración interna, ya que el robo ocurrió en una zona de alta seguridad.
