El primer capítulo de Friends se llama “The One Where Monica Gets a Roommate”, en español: “Cuando Mónica consigue una compañera de piso”) y se e estrenó el 22 de septiembre de 1994 en NBC.
La historia arranca en el Central Perk, la cafetería que se volvería el lugar de encuentro habitual del grupo. Están Monica, Chandler, Joey y Phoebe charlando, mientras Ross llega cabizbajo porque acaba de separarse de su esposa, Carol, quien le confesó que es lesbiana y lo dejó por otra mujer. Ross se siente derrotado, y sus amigos intentan animarlo. En medio de esa charla, entra una mujer vestida de novia: es Rachel Green, la antigua amiga de la secundaria de Mónica. Rachel acaba de dejar plantado a su prometido en el altar y busca refugio en Mónica. A partir de ahí, Mónica le ofrece quedarse con ella como compañera de piso.
El capítulo termina con Rachel decidiendo cortar las tarjetas de crédito de su padre y comprometiéndose a empezar de cero.
Es el comienzo de nuestra historia y la historia de “Friends” que duraría 10 años. Cada capítulo de Friends duraba aproximadamente 22 minutos en su versión original, ya que estaba pensado para un bloque de media hora en televisión con cortes comerciales. En algunos casos especiales (como el episodio piloto, finales de temporada o episodios con más trama) hay versiones extendidas que llegan a unos 25 a 28 minutos.
Friends transformó la televisión y marcó el inicio de un fenómeno cultural que, en 2025, continúa vigente. La serie, ideada por David Crane y Marta Kauffman, debutó en NBC situando a seis jóvenes en Nueva York y convirtió su retrato de la vida adulta, las relaciones y la amistad en un punto de referencia para varias generaciones.
Malas decisiones, buenas elecciones
Cada uno de los seis amigos tenía una personalidad tan divertida como interesante, y siguen presentes en las conversaciones de los más fanáticos y siempre es una opción para momentos de ocio. Pero detrás de esas 10 temporadas, esos 238 episodios, los miles de personajes que pasaron por sus vidas, hay otros que quedaron en el camino:
Uno no podría pensar en otro Joey Tribbiani que no sea Matt Le Blanc (y su “How you doin’?” ) o en una Phoebe Buffay tan excéntrica como la de Lisa Kudrow. Sin embargo, hubo un largo camino hasta llegar al elenco que pasó a la historia. Chandler Bing, por ejemplo, antes de tomar cuerpo en el actor Matthew Perry, tuvo la posibilidad de encarnarse en Jon Cryer ( Two and a half men ) y después en Jon Favreau ( Iron Man ). Este último finalmente participó de seis capítulos en 1997, como Pete Becker, el novio millonario de Monica. El papel de la hermana de Ross, en tanto, fue rechazado por Janeane Garofalo ( 24 ) y Jami Gertz ( Still Standing ). Leah Remini ( The King of Queens ) audicionó para ese papel, y, si bien no lo obtuvo, participó de Friends en el episodio en que muestran el nacimiento de Ben, el hijo de Ross y Carol. La primera elección para el papel de Rachel Green fue Téa Leoni ( Dick & Jane ), quien lo rechazó, por lo que cayó en manos de Courteney Cox. Sin embargo, la actriz, después de leer los guiones, prefirió ser Monica Geller, papel que todavía estaba vacante. Además, Eric McCormack (protagonista de Will & Grace ) audicionó para ser Ross Gelle, pero, después de algunas instancias, quedó descartado.
Otro escenario emblemático de la serie (aparte de los 2 departamentos) es el Central Perk, la sede de charlas, encuentros y peleas entre los seis. El bar está inspirado en el Manhattan Café, una cafetería situada en el West Village de Nueva York y el mítico sillón naranja que ellos usaban era una antigüedad rescatada de un sótano de Warner Bros. Además, los cuadros que decoraban la confitería se cambiaban cada tres días, y algunos eran acercados especialmente por artistas que los creaban para la ocasión.
Todos querían ser amigos de los chicos de Central Perk
Por Friends desfilaron la flor y nata de la época, haciendo apariciones estelares que hoy día siguen siendo recordadas. Como los cameos de George Clooney (se puso en la piel del DR. Michael Mitchell y junto al Dr. Jeffrey Rosen interpretado por Noah Wyle, terminaron en una cita doble con Rachel y Monica), Brad Pitt (La única vez que Pitt y Aniston compartieron pantalla en 2001, cuando aún estaban casados), Julia Roberts (interpretó a Susie Moss, una excompañera de Chandler), Jean-Claude Van Damme, Isabella Rossellini, Winona Ryder, Bruce Willis (apareció en tres episodios, desde el 21 hasta el 23 de la sexta temporada, en la piel de Paul Stevens uno de los novios de Rachel), Robin Williams y un largo etcétera.
Más de 22 millones de personas vieron el capítulo inicial en Estados Unidos, cifra que aumentó durante las temporadas siguientes. El grupo transitó decepciones sentimentales, aspiraciones laborales, solidaridad y enredos recurrentes, mientras el público presenció una química y un humor que caracterizaron a Friends desde el principio. En el cierre de la serie, en 2004, el número de espectadores en el final sobrepasó los 52 millones en Estados Unidos.
Los seis actores siempre negociaron los contratos en conjunto, dejando de lado los orgullos personales. “Los seis somos más fuertes que sólo uno de nosotros”, explicó alguna vez Lisa Kudrow. Con ese minigremio consolidado su primer cachet que arrancó en 22,500 dólares por episodio, terminó en un millón, en la última temporada. El espacio publicitario en las tandas de Friends también aumentaron considerablemente: su pico fue de 500.000 dólares por un anuncio de 30 segundos.
Un gran final de la serie y uno trágico para uno de ellos
El 6 de mayo de 2004, millones de personas en todo el mundo se sentaron frente al televisor sabiendo que no era un episodio más: era el final de Friends. Después de diez años, el Central Perk, el sillón naranja y el departamento de Mónica se despedían para siempre.
La trama fue el pretexto, pero lo importante estaba en la emoción. Ross, una vez más, corría detrás de Rachel, intentando detener lo inevitable: su partida a París. En paralelo, Mónica y Chandler daban el paso más grande de su vida: no solo adoptaban, sino que descubrían que serían padres de gemelos. Phoebe, con su humor delirante y su corazón enorme, ayudaba a que la historia avanzara. Joey, el amigo entrañable y despistado, mostraba que hasta en el adiós era capaz de sostener la risa y la ternura.
El momento que quedó grabado para siempre fue ese mensaje en el contestador: Rachel confesando que había bajado del avión. Ross, incrédulo, escuchando una y otra vez esas palabras mágicas: “Me bajé del avión”. El amor, tan postergado, finalmente encontraba su lugar.
Y llegó la escena final. El departamento de Mónica y Chandler, despojado de muebles y recuerdos, se convertía en un símbolo vacío. Uno a uno, los seis amigos dejaron sus llaves sobre la mesita: un gesto simple, casi ritual, que cerraba una década de historias compartidas.
—“¿Tomamos un café?”, preguntó Rachel.
—“Claro… ¿dónde?”, respondió Chandler, regalando la última broma en un silencio cargado de nostalgia.
El grupo salió del departamento y la cámara se detuvo un instante en la puerta, ya cerrada. La vida seguía, pero para millones de espectadores en todo el planeta, algo se había terminado ahí.
Las última frase de “Friends” la dijo Chandler el personaje Matthew Perry que tuvo un trágico final el 28 de octubre de 2023, Matthew Perry fue hallado sin vida en su residencia de Los Ángeles. El informe del forense indicó que una sobredosis accidental de ketamina, complicaciones cardíacas y ahogamiento ocasionaron su fallecimiento.
Friends no fue solo una sitcom: fue compañía, refugio y espejo de una generación. El final no solo despidió a los personajes: despidió a una época.