El aislamiento social, preventivo y obligatorio volvió a extenderse, y debemos permanecer en casa hasta, por lo menos, el 26 de abril. Las actividades comienzan a volverse repetitivas, por eso las recomendaciones son bienvenidas en este contexto. La cooperativa de escritores El Bien del Sauce consultó a algunos de sus escritores y escritoras que sugieran algunas lecturas.
Elena Faivovich, escritora de Haikus de Píncel y que también se dedica al arte plástico recomendó dos novelas: Las ciudades invisibles (1972) del periodista y escritor italiano, Ítalo Calvino, en donde el protagonista Marco Polo, relata una serie de historias de viaje a ciudades imposibles al emperador de tártaros, Kublai Kan. Por otro lado eligió Agua viva (1973) de la escritora ucraniana-brasileña Clarice Lispector, en donde muestra una conexión con la naturaleza y resume toda su obra inaugurando las características de su escritura en los años setenta.
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Otro de los consultados por la editorial fue Pablo Américo, autor de Heterotopías. Él se animó a sugerir tres libros: Vivir afuera (1998), en donde el escritor argentino Rodolfo Fogwill narra la historia de seis personajes durante once horas. En ellas se relatan temáticas de encuentro entre los protagonistas, convirtiendo a la novela en una de las más importantes de los años noventa en Argentina. También eligió Trilogía Involuntaria de Mario Levrero, el conjunto de las primeras tres novelas del autor uruguayo (La ciudad, El lugar y París), en donde se cuenta la vida de hombres solitarios que arriban a un lugar desconocido. Por último, nombra Vicio Propio (2009) de Thomas Pynchon, al que describe como el libro más fácil de leer del autor norteamericano. Allí se puede ver la contracultura californiana de los setenta, contextualizado en medio de los juicios a los integrantes del Clan Manson, en donde el protagonista investiga la desaparición de la ex novia de un empresario.
Claudio Ramos fue otro de los autores consultados por la editorial, en la que publicó No hay nada más en la noche. Él invita a la gente a leer Tacos Altos (2016) de Federico Janmaire, en donde la protagonista Lin Su Nuam, nos transporta, a través de su diario, desde la localidad de Glew, donde creció, y Suzhou, pueblo chino donde viven sus abuelos. “¿Soy China?”, es la pregunta con la que empieza esta novela y que atraviesa toda la historia.
También el autor de Mariposa de Otoño, Gustavo Ng, fue consultado por la editorial. Este decidió recomendar un libro que refleje la realidad: Payasadas de Kurt Vonnegut. Allí una plaga ha diezmado a la población estadounidense y las personas se sienten solas. En este contexto se llama a elecciones en las que los dos candidatos muestran posturas divididas: el slogan de uno es “nunca más solos”, mientras que las de otro es “solo, gracias a Dios”. El relato es un espejo en clave de humor, ciencia ficción y melancolía.
Por último, la poeta y fotógrafa, Silvina Sazunic, recomienda Y nuestros rostros, mi vida, breves como fotos (1984), del británico John Berger. Es capaz la obra más íntima del autor, en la que narra historias basadas en experiencias de vidas familiares y personales que nos llevan a conocer su interior. La autora, en su recomendación decidió dedicarle unas palabras al escritor que falleció en 2017: “Los escritores a veces usan grandes palabras para llevarlas a otro plano donde todo resplandece. También existen esos escritores, a veces, habitan una cuarentena del lenguaje donde todo artificio queda más allá de las ventanas. Berger, maestro”.
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