El consultor y analista político Federico González lanzó una advertencia que pega en el corazón de La Libertad Avanza: tras la declinación de José Luis Espert y el ascenso de Diego Santilli como primer candidato, la diferencia a favor del peronismo para las elecciones de octubre en la provincia de Buenos Aires podría escalar de 21 a 23 puntos.
Entrevistado en Palabras más, palabras menos, en la mañana de LA CIELO, González analizó el escenario después de la renuncia de Espert y planteó un “espectáculo político que no tuvo fisuras” que revela, en su opinión, que el candidato libertario “recibió dinero que nunca debería haber recibido y que Milei defiende lo indefendible”. “Pienso que Espert es culpable de acá a la China, que el caso es parecido a los bolsos de López y que, como decimos coloquialmente, Milei lo sigue defendiendo”, agregó.
El consultor y analista político no se quedó ahí sino que alertó sobre las consecuencias a nivel electoral. “Venimos midiendo día a día cómo impacta lo de Espert, y la diferencia a favor de Taiana, desde que estalló el escándalo, pasó de 14 21 puntos en una semana”, señaló. Y agregó un dato de alto impacto: “como preveíamos que podía haber una alternativa con Santilli, también lo medimos, y la diferencia es de 23 puntos, no de 21″.
En concreto González habló de un escenario aproximado de 49 a 27 a favor del peronismo, con Jorge Taiana como candidato, y de 51 a 27 con la inclusión de Santilli.
“Preguntábamos, suponiendo que Espert se bajara, a quién votarías. Y suponíamos que la diferencia de Espert, que era de 21, iba a volver a 14, que eran los puntos del espacio. Pero no, se amplió”, insistió González. La conclusión que planteó es clara: “A esta altura ya no importa a quién pongas. Este tema, elección en Provincia de Buenos Aires, es cosa juzgada”.
Ademas, alertó sobre el efecto que puede empezar a percibirse en otras provincias: “La conclusión es que no es Espert y no es Santilli: es Milei. Y Buenos Aires no es una isla, toca el corazón del Gobierno”.
No todas son malas para el Gobierno. González admitió que “Espert era un salvavidas de plomo” y que el recambio por Santilli “para la hemorroagia”, aunque, dijo, “no hay tiempo en estos 20 días para curarte de semejante sangría”.
“Puede pasar algún hecho disruptivo, algo que desvía la atención, pero entiendo que el daño está hecho y no me imagino que se pueda reparar en tan poco tiempo un daño de semejante magnitud”, insistió.