En su defensa política respecto del caso Vialidad que realizó hoy la vicepresidenta Cristina Kirchner desde el Senado, expuso una serie de elementos que ligan al ex secretario de Obras Públicas, José López, con el círculo del ex presidente Mauricio Macri.
El 14 de junio de 2016, José López, el segundo de la cartera de Obra Públicas que conducía Julio de Vido, fue encontrado en la madrugada frente a un convento con relojes de alta gama, un fusil y 9 millones de dólares escondidos en bolsos. El video del escándalo inundó los canales de televisión, y se volvió la prueba tácita de la “corrupción kirchnerista”.
TE PUEDE INTERESAR
El Tribunal Oral Federal I de la Ciudad de Buenos Aires, a cargo de los jueces Adrián Grünberg, José Michelini y Ricardo Basílico, condenó en junio de 2019 a López por enriquecimiento ilítico, a su esposa y a los empresarios Andrés Enrique Galera y Eduardo Ramón Gutiérrez, como partícipes necesarios del enriquecimiento ilítico.
López obtuvo una pena unificada en septiembre de 2020 de siete años y medio de prisión, por la condena de 6 años por enriquecimiento ilícito y otro año y medio más por portación ilegal de armas. Mientras que los empresarios obtuvieron dos años y medio de ejecución condicional, es decir excarcelables.
En ese juicio en el que se condenó al ex secretario de Obras Públicas por enriquecimiento ilícito, los fiscales aportaron como prueba los chats de José López con los distintos empresarios de la construcción.
La misma prueba fue utilizada ahora por el fiscal Luciani para acusar a Cristina Kirchner por ser jefa de una asociación ilícita, en tanto que esos chats comprobarían a su criterio la relación entre el empresario Lázaro Báez con José López y por ende con la entonces presidenta.
Sin embargo, la vicepresidenta resignificó hoy la aparente prueba en su contra, para mostrar lo que los fiscales no quisieron indagar: las principales conversaciones de José López eran con Eduardo Gutiérrez y Nicolás Caputo, el “hermano de la vida” de Mauricio Macri.
Lázaro Báez tuvo 6 intercambios con José López, Juan Chediak 86, Nicolás Caputo 109 y Eduardo Gutiérrez 177.
Eduardo Ramón Gutiérrez era el presidente del Grupo Farallón y dirigente de la Cámara Argentina de la Construcción. La familiaridad que muestra en sus chats es notoria y de hecho Gutiérrez es el dueño de la casa en la que vivía José López en el Tigre.
Cuando los jueces de la Cámara de Casación Penal Alejandro Slokar, Carlos Mahiques y Guillermo Yacobucci confirmaron las condenas del juicio a López y compañía, el juez Mahiques votó en contra de hacerlo “por falta de pruebas” sobre los dos empresarios condenados, entre ellos Eduardo Gutiérrez.
Por ello, entre otros motivos hoy Cristina Kirchner cargó contra el juez Mahiques, ex ministro de Justicia del gobierno de María Eugenia Vidal y contra su hijo Ignacio Mahiques, quien junto al fiscal Guillermo Pollicita pidió indagar a la vicepresidenta en la causa en la que hoy se defiende.
El otro de los empresarios con un significativo intercambio de conversaciones con José López, invitaciones a cenar y arreglos de pagos entre otras cuestiones, era Nicolás Caputo, el “hermano de la vida” de Macri, uno de los principales contratistas de la Ciudad de Buenos Aires y con un historial de importantes obras públicas en Argentina y países limítrofes. “Se juntaban a cenar pero la jefa de la asociación ilícita soy yo”, ironizó Cristina Kirchner.
“Si había un caso para investigar la corrupción en la obra pública, era este, el de José López revoleando 9 millones de dólares a un convento. Por eso, había que ver de dónde vinieron esos 9 millones de dólares”, afirmó este martes Cristina Kirchner, quien ya había solicitado una auditoria externa independiente sobre toda la obra pública nacional.
Lo cierto es que tras cumplir cuatro años y medio de prisión, el ex secretario José López fue excarcelado luego de ser incluido en el programa de protección de testigos por haber sido considerado un “imputado colaborador” en la causa de los cuadernos. La Ley del Arrepentido impulsada por Cambiemos en 2016 permitió la reducción de penas para los aportantes de datos, a la vez que ya había cumplido gran parte de su condena.
Asimismo, Cristina Kirchner apuntó sus dardos sobre lo que el juicio a José López no reveló. “¿Qué hicieron los fiscales con estos teléfonos y estas llamadas? Se mando un oficio a la Reserva Federal de Estados Unidos porque había billetes, fajos termosellados, salidos directamente de la Reserva Federal”, expresó.
Y continuó: “¿Qué informó la Reserva Federal? Dijo que sí, que un fajo había sido enviado al Banco Finansur. ¿Quién estaba en el Banco Finansur? Un señor que se llama Sánchez Córdova. ¿Quién es el señor Sánchez Córdova? Un señor que integraba la comisión directiva con Macri en Boca.”
En efecto, un tercio de los dólares encontrados a José López en el convento provinieron de la entidad conducida por Jorge Sánchez Córdova, tesorero del club Boca Juniors durante la gestión de Daniel Angelici, operador de Mauricio Macri.
Como el Banco Finansur fue adquirido en 2015 por el Grupo Indalo, de Cristóbal López, el hijo de Jorge Sánchez Córdova, Juan Manuel declaró ante la jueza Servini de Cubria -que investigaba la persecusión a Cristobal López- que conocían a José Pepín Rodríguez Simón, operador judicial de Macri y prófugo de la Justicia por esa causa, desde el año 1995 pero que recién se volvieron a encontrar por pedido de Rodríguez Simón en 2016.
“¿Saben por qué cuando empezaron a tirar el ovillo de esto pararon? Porque aparecieron ellos, los macristas”, aseguró Cristina Kirchner.
TE PUEDE INTERESAR