La Cámara de Diputados de la Provincia de Buenos Aires convirtió en ley un proyecto del senador del Frente de Todos, Marcelo Feliú, que introduce modificaciones a la vigente Ley de Adopción con el objetivo de agilizar y mejorar el proceso adoptivo.
La iniciativa, que ya contaba con media sanción del Senado, coloca la normativa bonaerense a la vanguardia nacional en materia de derechos de niños, niñas y adolescentes.
La Ley 14.528 había sido sancionada hace más de una década y el propio Feliú había sido uno de sus impulsores cuando era diputado.
Con el paso del tiempo, la necesidad de actualizarla se volvió evidente frente a los cambios introducidos por la legislación nacional y a las dificultades prácticas que atraviesan los procesos de adopción.

“Tenemos que ser sensibles a los cambios necesarios para mejorar el proceso de adopción. Cada día que a partir de hoy se gana puede significar que un niño en situación de abandono acceda a tener la familia a la que tiene derecho”, sostuvo el senador al fundamentar la iniciativa.
Qué cambia con la nueva Ley de Adopción
La reforma aprobada apunta a reducir la burocracia y fortalecer las garantías para los chicos y chicas que esperan una definición sobre su situación familiar. En concreto, la ley introduce una serie de modificaciones centrales:
- Se garantiza y reafirma el principio del Interés Superior del Niño, dando participación a niños, niñas y adolescentes en los procesos de declaración de adoptabilidad y adopción.
- Se asegura la asistencia de un letrado especializado en niñez y adolescencia durante todo el proceso.
- Se otorga un rol preponderante a los servicios locales de promoción y protección de derechos.
- Se incorpora la posibilidad de dictar figuras sustitutivas a las medidas de abrigo en situaciones de alta vulnerabilidad cuando no estén reunidas las condiciones de adoptabilidad, además de profundizar la capacitación de todas las partes intervinientes, especialmente de los pretensos adoptantes.
- Se establecen licencias especiales en el sector público para los adoptantes, tanto durante las guardas preadoptivas como en la adopción y las tramitaciones administrativas.
- Se sugiere que los convenios colectivos de trabajo adopten una postura similar respecto a las licencias especiales.
Menos plazos, más derechos y licencias especiales
Uno de los ejes centrales de la reforma es la unificación de plazos con la legislación nacional, lo que permitirá acortar los tiempos del procedimiento de adopción y agilizar los dictámenes judiciales, siempre dentro del debido resguardo del Interés Superior del Niño.
Los trámites de adopción suelen implicar una extensa cadena de pasos burocráticos que convierten al proceso en un camino complejo. En ese contexto, los más afectados son los niños, niñas y adolescentes que esperan que se resuelva su situación, muchas veces en escenarios de alta vulnerabilidad.
En ese marco, Feliú remarcó un punto central del debate: “Hay un imaginario social que aún entiende a la adopción como un derecho de los adultos cuando en realidad es un derecho de los niños y niñas que no pueden ser asumidos por sus familias de origen a tener una familia”.
Otro aspecto clave de la reforma es la mencionada incorporación de licencias especiales, pensadas para facilitar la construcción del vínculo entre adoptantes y adoptados. El objetivo es garantizar el tiempo y el espacio necesarios para el desarrollo del lazo familiar, tanto durante la guarda como una vez concretada la adopción.
El senador destacó además el trabajo colectivo que hizo posible la sanción de la ley, con el aporte de todos los espacios políticos del Senado y de la Cámara de Diputados, organizaciones sociales vinculadas a la temática, funcionarios del Registro de Adoptantes de la Suprema Corte bonaerense, magistrados del fuero de familia y profesionales de los servicios locales de protección de derechos.
“Frente a la necesidad y la demanda de modificaciones para agilizar y mejorar la ley primó el diálogo y el interés común por sobre los intereses personales o partidarios. La voluntad de acuerdo y el trabajo de muchos permitieron este avance en el proceso de adopción en la provincia de Buenos Aires”, concluyó Feliú.

