El juez federal Ernesto Kreplak convirtió en prisión preventiva la detención de los principales imputados en la causa por la adulteración de medicamentos con fentanilo, que provocó la muerte de casi 100 personas en distintos puntos del país.
Entre los acusados, se encuentra la familia García Furfaro completa, señalada como responsable del laboratorio donde se habría producido y distribuido el fentanilo contaminado.
Los tres miembros del núcleo familiar —Ariel García Furfaro, su hermano Diego García y la madre de ambos, Nilda Furfaro— continuarán detenidos bajo la imputación de adulteración de medicamentos agravada por el resultado de muerte, delito que prevé penas de hasta 25 años de prisión.
Además, el juez ordenó embargos millonarios sobre los bienes de los principales acusados:
Para Ariel García Furfaro, considerado el dueño y la cara visible del laboratorio, el embargo asciende a 1 billón de pesos.
Su hermano Diego García y su madre, Nilda Furfaro, fueron embargados por 500 millones de pesos cada uno.
En el mismo fallo, también se dictó la prisión preventiva para otros tres involucrados en la causa: Javier Martín Tchukrán; José Maiorano; Carolina Ansaldi
Para ellos, el juez ratificó las medidas cautelares previas, incluyendo embargos e inhibiciones generales de bienes.
En paralelo, el juez procesó, aunque sin prisión preventiva, a otros ocho imputados: María García; Wilson Pons; Adriana Iúdica; Arzolidys Dayana; Astudillo Bolívar; Rocío Garay; Edgardo Sclafani; Eduardo Darchuk
Finalmente, se dictó la falta de mérito para Damián García, Horcoi Tallarico, Rodolfo Labrusciano y Víctor Bocccio, aunque seguirán siendo investigados.
La causa sigue su curso con expectativa pública, luego de que se confirmara que los lotes contaminados con fentanilo provocaron al menos 20 muertes comprobadas, aunque las cifras finales podrían superar el centenar según los peritajes en curso y los informes forenses recolectados por la justicia.