Con el Presupuesto 2025 y el endeudamiento ya asegurados en la Legislatura, el Gobierno bonaerense enfrenta ahora un escenario que no le da tregua: la rápida reactivación de los reclamos salariales por parte de los gremios estatales. A la ofensiva de ATE y la posterior presión de los trabajadores judiciales, se sumó en las últimas horas la demanda del Frente de Unidad Docente Bonaerense (FUDB), que exige retomar cuanto antes la negociación paritaria.
La organización que reúne a los principales sindicatos del sector elevó un pedido formal al Ministerio de Trabajo para que convoque de manera urgente a la Comisión Técnica Salarial y reactive la Paritaria Docente 2025. La solicitud, publicada en la web del frente y luego difundida en redes sociales, señala que la docencia necesita una recomposición inmediata para evitar un cierre de año con salarios nuevamente golpeados por la inflación.

El FUDB, integrado por AMET, FEB, SADOP, SUTEBA y UDOCBA, insistió en que la actualización debe ubicarse por encima del índice inflacionario, a fin de recuperar parte del terreno perdido en los últimos meses. El planteo se suma a las advertencias que distintos espacios sindicales ya venían realizando sobre el deterioro del poder adquisitivo en el sector público bonaerense.
Reunión pedida y agenda pendiente
En paralelo al reclamo salarial, el frente solicitó una reunión con la flamante directora general de Cultura y Educación, Flavia Terigi, quien asumió su cargo la semana pasada. Según informaron, el objetivo del encuentro es consensuar una agenda de trabajo que incluya temas aún pendientes y otros vinculados a la planificación del ciclo lectivo 2026, desde cuestiones administrativas hasta aspectos relacionados con infraestructura y condiciones laborales dentro del sistema educativo.
El pedido de reapertura llega en un contexto donde la última negociación docente con resultado favorable había sido en agosto, cuando se acordó un incremento del 5% en dos tramos. La ausencia de nuevas ofertas desde entonces y la aceleración de los precios alimentaron el malestar en el sector. A ello se suma que la última reunión paritaria con los docentes se había realizado el 18 de noviembre sin que la Provincia presentara ninguna propuesta.
La presión docente se articula con la escalada de reclamos protagonizada por otros gremios. ATE fue el primero en activar la demanda de reapertura salarial y la Asociación Judicial Bonaerense retomó luego el mismo camino, señalando que esperaba una convocatoria que nunca llegó tras la reunión realizada el 20 de noviembre. Ambos sectores advirtieron que la falta de respuestas complica la planificación económica hacia el año próximo y pidieron abordar también cuestiones estructurales como subcategorías, jubilaciones y otros ítems pendientes.
Con el frente gremial movilizado y la administración pública reclamando definiciones antes del cierre anual, todas las miradas quedan ahora puestas en la respuesta del Ejecutivo provincial. Los sindicatos esperan una convocatoria que permita avanzar en acuerdos que contemplen la evolución de precios y devuelvan previsibilidad a los salarios. En un fin de año atravesado por tensiones acumuladas, el Gobierno provincial enfrenta el desafío de sostener el diálogo y evitar que el conflicto escale.

