La presión ejercida por los familiares de las víctimas del fentanilo contaminado logró esta semana quebrar la estrategia dilatoria de La Libertad Avanza (LLA) en la Cámara de Diputados. Después de semanas de maniobras para bloquear el tratamiento, el oficialismo se vio forzado a mover una de sus piezas: la Comisión de Asuntos Constitucionales, presidida por el libertario Nicolás Mayoraz, podría ser convocada en las próximas horas.
El cambio de escenario en la actitud del oficialismo en la Cámara Baja no parece casual. En el origen de la investigación, aliados de LLA apuntaban a Fuerza Patria e incluso insinuaban hipótesis acusatorias contra el peronismo por el vínculo familiar del juez a cargo de la causa, Ernesto Kreplak, con el ministro de Salud provincial. En las últimas horas, la investigación judicial dio un giro: el Ministerio de Salud de la Nación perdió el carácter de querellante y ahora se investiga a funcionarios nacionales. Esta semana incluso se allanaron oficinas de la ANMAT y de otros organismos públicos dependientes del Ministerio de Salud, además de domicilios particulares de funcionarios nacionales.

En ese contexto, el presidente de la Cámara, Martín Menem, resolvió que el tratamiento de la Comisión Investigadora parlamentaria fuera girado a Asuntos Constitucionales. Se trata de una comisión que, por su naturaleza, no suele intervenir en estos temas, que tradicionalmente se debaten en la Comisión de Peticiones, Poderes y Reglamento. El giro fue leído como una maniobra destinada a empantanar el debate: una práctica habitual del oficialismo, que deriva temas sensibles a comisiones presididas por legisladores propios para congelar cualquier avance. Idéntico tratamiento aplica José Luis Espert en los temas vinculados con el Presupuesto, paralizando la comisión que preside.
En las últimas horas, una de las legisladoras que alimentó esa sospecha, Silvana Giudici, admitió que, pese a las especulaciones, “como siempre me decía la diputada Tolosa, porque también voy a reconocer que ella me decía que la causa de Kreplak avanza, mañana esto va a tomar un rumbo importante”.
En esta oportunidad, la maniobra fue parcialmente frustrada. La Comisión de Peticiones, que preside Silvia Lospennato (PRO), ya se reunió y avanzó en la elaboración de dos pre-dictámenes, que podrían fusionarse en uno solo en las próximas horas. La traba, hasta ahora, persistía en Asuntos Constitucionales, presidida por Mayoraz.
El malestar de los familiares se expresó con dureza. En los últimos días denunciaron públicamente la falta de compromiso del Congreso y advirtieron sobre “maniobras dilatorias y un doble juego político por parte del oficialismo para bloquear cualquier avance”. Las declaraciones generaron un ruido interno en el bloque libertario, que comenzó a evaluar abrir el tratamiento.
Aunque el futuro de la Comisión Investigadora aún no está definido, el escenario empieza a moverse. La presión de los familiares, sumada al deterioro del discurso oficialista, comienza a mostrar fisuras en el muro defensivo que La Libertad Avanza había levantado en el Congreso.

