“Creo que el capitán de la Selección debe salir a pedir las disculpas de ese caso, lo mismo que el presidente de la AFA”, aseguró el subsecretario de Deportes de la Nación, Julio Garro, en relación a la polémica que se generó por un video en el que Enzo Fernández entonaba una canción ofensiva hacia los futbolistas franceses de ascendencia africana.
En una entrevista con Urbana Play, el ex intendente de La Plata se mostró compungido y ensayó una reflexión en la que aseguró que la difusión del video, en medio de los festejos por la Copa América, “nos deja como país mal parados con tanta gloria”.
Momentos más tarde, y pese a que circulan los audios donde habló de manera clara, se arrepintió e intentó desmentir lo que dijo. “Desmiento categóricamente que haya solicitado a Messi que pida disculpas. Sería una falta de respeto a quien nos honra permanentemente con su calidad humana y deportiva”, aseguró ante la catarata de críticas que recibió de propios y ajenos.
Garro, que llegó a la política de la mano del PRO, luego perder la segunda reelección contra Julio Alak y terminar su mandato, dio el salto a La Libertad Avanza y se sumó a la gestión de Javier Milei. El claro choque ideológico le genera un roce con propios y ajenos: el ala libertaria salió a marcarle la cancha e incluso le pidió la renuncia.
El día que Julio Garro fue denunciado ante el INADI por “discriminacion y racismo“
La moralina de Garro, sin embargo, choca con su pasado como jefe comunal: en ocho años de gestión su conflicto contra los manteros senegaleses fue una constante, por la cual terminó denunciado por discriminación y racismo, tras acusarlos de formar parte de una red de trata de personas.
Pese a que los primeros inmigrantes, mayormente de Nigeria y Senegal, se instalaron en la ciudad en el año 2006, la comunidad creció poco a poco y era habitual verlos en el centro de la ciudad vendiendo baratjas. Para 2019, el municipio que ya tenía cuatro años bajo la gestión del actual subsecretario de Deportes de la Nación, comenzó a reprimirlos, detenerlos, y generó un conflicto hasta entonces inexistente.
El punto más álgido de la cruzada anti manteros se dio en 2020, cuando a través de un polémico spot acusaban a los vendedores ambulantes de formar parte de una organización criminal vinculada a la trata de personas. “No vamos a parar hasta dar con los mafiosos que se esconden detrás de la venta ambulante”, prometía Garro.
Sin embargo, la denuncia no fue más que una cortina de humo para justificar la detención de los manteros senegaleses. Al año siguiente, ante la falta de pruebas por parte del Municipio, la Justicia desestimó la denuncia y declaró que hubo “inexistencia de delito”.
Llamativamente, hoy Garro reflexionó que se deberían pedir disculpas, o incluso “alguna sanción más ejemplificativa” para quienes tengan conductas racistas. La comunidad senegalesa de La Plata aún las espera de su parte.