La industria de la construcción volvió a prender las alarmas. En el marco del 146º Consejo Federal de la Cámara Argentina de la Construcción, realizado en Paraná, los empresarios del sector advirtieron que atraviesan “una fuerte crisis” marcada por la caída de la actividad, la incertidumbre financiera y la paralización de obras en todo el país.
En un documento difundido tras el encuentro, las empresas remarcaron que la detención de la inversión pública “genera pérdidas económicas, frena servicios esenciales, compromete la competitividad y aumenta la deuda de infraestructura”. A esto se suma que también la construcción privada está prácticamente paralizada, lo que profundiza el impacto en el empleo y en la economía.
“Cuando la construcción se detiene, se resiente todo el entramado productivo. La construcción no es solo una actividad económica: es inclusión, progreso y comunidad”, señalaron en el comunicado.
Deuda de infraestructura y falta de inversión
Los constructores pusieron el foco en la creciente “deuda de infraestructura” que arrastra el país y que se refleja en rutas deterioradas, puertos sin modernización, sistemas energéticos obsoletos y falta de obras de saneamiento. “Este déficit eleva el costo argentino, resta competitividad, limita el desarrollo regional y compromete el futuro productivo”, alertaron.
Además, cuestionaron la falta de soluciones respecto a los contratos frenados y deudas del Estado con empresas por proyectos ya ejecutados. Según explicaron, la infraestructura social —viviendas, hospitales, escuelas, agua potable y cloacas— es esencial no solo para garantizar derechos sino también para dinamizar la economía.
La propuesta de los empresarios
Como salida, el Consejo Federal de la construcción planteó la necesidad de un plan federal de 20 años que incluya:
- Reactivación de obras avanzadas.
- Reconocimiento de deudas del Estado.
- Nuevos mecanismos mixtos de financiamiento.
- Estímulo al crédito hipotecario y desarrollo inmobiliario.
- Transparencia en la gestión.
- Promoción del empleo formal.
Contexto: construir se volvió más caro que nunca
El reclamo de los empresarios se suma a un dato que ya inquietaba al sector: el metro cuadrado en la Provincia de Buenos Aires roza los $2 millones, según un informe de Apymeco publicado en agosto. En un año, el costo se triplicó en pesos y las familias que soñaban con la casa propia hoy enfrentan la disyuntiva de apurar los proyectos o postergarlos indefinidamente.
La combinación de costos en alza, falta de inversión pública y paralización de obras privadas genera un escenario que, según advierten desde la Cámara, pone en jaque a miles de empresas y empleos en todo el país.