Un episodio de violencia extrema al volante encendió las alarmas sobre la seguridad vial en uno de los corredores más transitados del país. La Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) pidió la suspensión de las licencias de conducir de un automovilista y un motociclista que protagonizaron una peligrosa pelea en plena Autopista Buenos Aires–La Plata, una escena que quedó registrada en video y se viralizó rápidamente en redes sociales.
Las imágenes, difundidas inicialmente por la señal de noticias TN y luego replicadas por distintos portales, muestran una secuencia breve e inquietante de 50 segundos.
En medio del tránsito, ambos conductores se increpan, se cruzan con maniobras temerarias y detienen la marcha de manera imprudente, exponiendo su propia integridad y también la de decenas de personas que circulaban por la traza en ese momento, a la altura del puente sobre el riachuelo.
El video, grabado por otro automovilista que venía detrás, fue clave para reconstruir lo ocurrido. Allí se observa cómo la discusión escala en segundos, en un contexto donde cualquier error puede derivar en una tragedia.
Una intervención tras el impacto mediático
La difusión del material audiovisual actuó como disparador para la intervención del organismo nacional. Tras tomar conocimiento del hecho y analizar las imágenes, la ANSV logró identificar a los protagonistas e inició el correspondiente proceso administrativo para solicitar la inhabilitación de ambas licencias.
Desde el organismo consideraron que las conductas registradas, como circulación por la banquina, frenadas intempestivas y detenciones indebidas, constituyen faltas graves y evidencian una actitud incompatible con la conducción responsable.
En ese sentido, se destaca que la vía pública no es un espacio para dirimir conflictos personales y que este tipo de reacciones al volante representan un riesgo extremo y evitable.
El expediente administrativo ya se encuentra en marcha y contempla la suspensión de los registros de conducir, una medida que la ANSV viene aplicando en distintos casos de violencia vial documentados por cámaras o denuncias públicas.
Una escena que se repite y preocupa
Más allá de este caso puntual, el episodio pone una vez más al escrutinio público una problemática creciente como es la naturalización de la agresión en el tránsito.
Insultos, persecuciones y maniobras intimidantes ya son parte de un paisaje cotidiano que, cuando queda registrado en video, permite visibilizar prácticas que muchas veces pasan inadvertidas a las autoridades.
Desde la ANSV insistieron en que este tipo de comportamientos no serán tolerados y que cada intervención busca enviar un mensaje indubitable, y es que conducir siempre constituye un acto de responsabilidad colectiva. La autopista no es un ring ni un lugar para descargar broncas personales.
El video que motivó la sanción fue incorporado formalmente al expediente y forma parte de las pruebas que respaldan la decisión del organismo.
Mientras tanto, el caso suma un nuevo antecedente en la lucha contra la violencia vial y refuerza el rol de los registros audiovisuales y los medios de comunicación como herramientas clave para activar controles y sanciones.
Quizás otra hubiera sido la consecuencia judicial de haber existido la tecnología actual en el accidente del recordado cuartetero Rodrigo Bueno.

