Nuevos municipios echaron mano a la polémica tasa vial a los combustibles para tratar de acomodar sus finanzas en medio de la caída en la recaudación producto de la caída de fondos coparticipables y la baja cobrabilidad ante la situación social.
Tal como ocurrió en 2024, el cierre de año volvió a encender la polémica con la postura de una veintena de municipios de gravar la carga de las naftas a través de la denominada tasa vial, que plantea como contraprestación servicios como el mantenimiento de la red vial urbana.
Este tipo de tributos son objeto de una fuerte disputa política entre un gobierno nacional que condena el cobro de tasas municipales al sector pero que no rebaja los impuestos nacionales a los combustibles y ni siquiera invierte los recursos que están afectados por ley a obras como en el caso del fondo hídrico.
Los jefes comunales, en tanto, se escudan en las autonomías municipales y en el “escaso” monto dentro del valor total del litro de combustibles o GNC, en comparación con los tributos nacionales.
Los nuevos municipios que impulsan la tasa vial a los combustibles
En las últimas horas, el municipio de Cañuelas logró la aprobación en instancia preparatoria de una tasa vial que impone un sobrecargo de entre el 1 y el 2 % en las ventas de combustibles líquidos y gas natural comprimido (GNC) que despachan en la localidad.
Los recursos estarán destinados al mantenimiento vial municipal y los agentes de retención y transferencia serán las estaciones de servicio.
Para que la nueva tasa quede vigente deberá ser refrendada la próxima semana por la Asamblea de Concejales y Mayores Contribuyentes.
El proyecto es impulsado por la intendente Marisa Fassi (Fuerza Patria), quien semanas atrás recibió cuestionamientos de sectores rurales por un nuevo incremento al traslado de hacienda al Mercado Agroganadero que en diciembre llegó al 124%.
En Ramallo, sectores opositores denunciaron que el nuevo Código Tributario impulsado por el intendente Mauro Poletti (Fuerza Patria) incluye la creación de una tasa del 2% sobre los combustibles.
Consideran que el nuevo tributo será trasladado de manera directa al precio final que pagan los contribuyentes y que tendrá consecuencias negativas para el comercio ya que transportistas optarán por cargar en localidades donde no se cobre el tributo.
En Coronel Suárez, el intendente vecinalista Ricardo Moccero impulsa la creación de una tasa vial que grava en un 2% la carga de los combustibles. La noticia generó rechazo en entidades del campo y la Cámara Empresaria, quienes se entrevistaron este viernes con el jefe comunal.
“Es una gota en el mar lo que se va a cobrar. En un tanque de combustibles puede representar 1200 pesos por cada 60 mil o 70 mil pesos que cuesta cargar un tanque de nafta o en tanques grandes no más de 1800 pesos” expresó en declaraciones a La Nueva Radio.
En ese sentido dijo que es sobre el costo neto del combustible- sin impuesto- “y además el gobierno nacional aumentó el 43% y nadie dijo nada. Estos fondos están afectados a la reparación de las calles” explicó.

