Con más de 30 mil seguidores, Bruno Contigiani comparte en las redes su pasión por la tornería industrial y, también, por la educación técnica: “Te forma como persona, te da las raíces de lo que puede llegar ser el mercado laboral próximo, te enseña cosas de tu día a día que se puedan llegar a romper”, contó en diálogo con Infocielo.
El influencer compartió recientemente un video que se volvió viral y que llegó hasta la Ministra Sandra Pettovello: “En vista del nuevo presupuesto presentado para el próximo año por el Gobierno, mientras todos están hablando de las universidades a mí me toca hablar de los colegios técnicos”, sostenía Bruno.
Y es que en el proyecto nacional de presupuesto para el 2026 se elimina el financiamiento previsto para la educación técnica. Esta medida afecta a 277 escuelas técnicas de la provincia de Buenos Aires, a donde asisten 200 mil estudiantes.
Tal y como explica Contigiani en su video viral, el Estado está obligado a aportar el 0,2% del PBI a las instituciones de educación técnica: “Se ve que el recorte también llegó a este sector, que ya viene siendo vapuleado tanto por gobernadores, presidentes, desde aquel fatídico gobierno de los 90, que enfatizaron la responsabilidad de las técnicas en las provincias, la escuela técnica se ha venido a pique”, agregaba el influencer que lleva como bandera que “Argentina será industrial o no será”.
De acuerdo al joven influencer, al Gobierno actual no le interesa en absoluto la industria nacional: “Quiere vender YPF, no quiere que los pibes aprendan oficios, lo que es bastante contradictorio”, y es que el video de Bruno que la ministra de Capital Humano levantó en sus redes apuntaba contra el Gobierno por los recortes en las técnicas y ella respondió que se estaba formando una “universidad de oficios”.
Por su parte, el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires repudiaron la medida del Gobierno Nacional que avanza contra lo establecido en el Artículo 52 de la Ley N° 26.058, que garantiza la existencia del Fondo Nacional para la Educación Técnico Profesional.
Y en un comunicado sostuvieron: “Esta decisión vulnera una política pública clave que asegura financiamiento estable para fortalecer la calidad educativa, la innovación tecnológica y el derecho de las y los estudiantes a acceder a formación con igualdad de oportunidades. Se profundiza así un modelo que debilita la educación pública y restringe derechos fundamentales”
¿Cuál es la importancia de la educación técnica?
Según el influencer de 20 años la educación técnica “fomenta mucho que los pibes sigan aprendiendo”, y se explaya: “Te forma como persona, te da las raíces de lo que puede ser el mercado laboral próximo, te enseña cosas de tu día a día que se puedan llegar a romper, si ahora se me rompe un circuito eléctrico de la casa lo sé arreglar e hice un sólo año de electricidad”.
Bruno comenzó a hacer videos de tornería en su taller hace sólo meses y en muy poco tiempo ya formó su comunidad ne Instagram, con su propio lenguaje, su humor y -por supuesto- sus mismos intereses. Este público está bien denifido: varones de entre 18 y 19 que estudian en la técnica, y también de 28 años para arriba.
Otros creadores de contenido que muestran cómo realizan sus oficios y que Bruno nombra son Cooperativa de Trabajo Escuela de Herrería Lesbiana y Ale Weiss de Tornería Bigote. Sin embargo, no son el contenido que más circula en las redes.
Al respecto, Bruno opinó: “Se perdió mucho la cultura de lo que es el oficio con las manos, veo que hay mucha gente que no quiere dejar el cuerpo y es totalmente entendible, yo salgo del laburo y me duele todo el cuerpo”. Y, en este sentido, completó: “Yo no estoy en contra del estudio, pero sí hablo de que se puede hacer mucha más plata si aprendés un oficio muy requerido como puede llegar a ser el de un gasista o un tornero, que con si estudiás una licenciatura en computación, por ejemplo”.
Al respecto del ajuste y la caída de la industria, Bruno traza un paralelismo con los 90: “Cuando mi viejo empezó a laburar en los talleres, cuando impactan las medidas del menemismo, las medidas de libre mercado, tuvieron que cerrar el taller y él estuvo ocho años trabajando de fiambrero. Eso mismo está pasando ahora. A medida que van entrando respuestos chinos baratos, se le deja de dar bola a esto. En mi rubro en particular, noto además de una baja en la actividad, que la gente ya no está optando por fabricar cosas nuevas, sino por reparar cosas muy antiguas, para darle una segunda vida, que tire lo que pueda, eso te habla de una condición económica de la gente“.