La disputa por el control de La Libertad Avanza en la Legislatura venía escalando en silencio hasta que Agustín Romo decidió llevarla a un terreno inesperado: que intervenga Karina Milei para sostenerlo como jefe de bloque. En medio de versiones que anticipaban su desplazamiento de la jefatura del bloque de Diputados, el tuitero libertario apeló al “Jefe”, la hermana del presidente accedió a hablar con Sebastián Pareja, quien tenía sentenciado al tuitero.
Ese gesto terminó de blanquear la fractura entre los sectores que responden a Santiago Caputo y el armador bonaerense de Sebastián Pareja. En ese contexto, la hermana del Presidente intervino para frenar la avanzada. La directiva fue clara: “Romo debía ser confirmado en el cargo y el bloque no podía desviarse de la línea del Gobierno nacional, especialmente en un año donde La Libertad Avanza busca consolidarse como la principal oposición a Axel Kicillof”.
PAREJA ACATA, PERO FIJA CONDICIONES
La decisión de Karina Milei obligó a Pareja a recalibrar su estrategia. El armador, que desde hace meses viene concentrando poder y depurando espacios internos, aceptó sostener a Romo al frente de la bancada, pero lo hizo bajo una fórmula que reveló su verdadera intención: les anunció a los propios que el tuitero tendrá “unos meses de prueba” para demostrar conducción y disciplina política. El malestar con Romo por su poco apego al trabajo legislativo fue evidente durante todo el año y la voz cantante libertaria fue la del recién llegado al bloque, Guillermo Castello.
De los veinte diputados libertarios, solo dos responden directamente al “Las Fuerzas del Cielo” –Romo y Nahuel Sotelo– mientras que el resto forman parte del entramado que Pareja consolidó municipio por municipio. En ese reparto de fuerzas, el regreso de Pareja como diputado nacional electo y su rol como presidente del partido en la Provincia le permiten marcar el ritmo interno. La ratificación de Romo, por lo tanto, llegó acompañada de un mensaje hacia adentro: la convivencia será posible, siempre y cuando la mayoría parejista mantenga el timón de las decisiones.
OSABA, EL NOMBRE QUE CAMBIA TODO
La verdadera jugada del armador bonaerense no pasó por la jefatura del bloque, sino por la mesa de conducción legislativa. Allí impuso a Juanes Osaba, su principal operador territorial, como vicepresidente de la Cámara de Diputados, el cargo institucional más relevante que le correspondía a La Libertad Avanza.
Con esa decisión, el reparto de poder quedó redefinido: Romo conserva la visibilidad del liderazgo formal, pero el manejo político, la articulación con el resto de las fuerzas y la administración diaria de los acuerdos pasan por manos de Osaba. En términos prácticos, el platense se convierte en el verdadero ejecutor de la estrategia libertaria en la Legislatura, con acceso directo a las negociaciones y a los resortes institucionales que definen la dinámica parlamentaria.
UN BLOQUE QUE LLEGA DIVIDIDO AL NUEVO PERÍODO
El reacomodamiento dejó secuelas dentro de la tropa libertaria. Aunque todos los sectores intentaron mostrar una foto de unidad tras la sesión preparatoria, la tensión es evidente. La mayoría de los legisladores que asumirán hasta 2027 responden al diseño que Pareja consolidó en la provincia, mientras que la referencia de Caputo se reduce a un núcleo acotado y en retroceso.
En ese marco, Romo afronta un desafío doble: sostener una jefatura donde tiene minoría interna y, al mismo tiempo, demostrar que puede coordinar a un bloque atravesado por disputas previas, viejas rivalidades virtuales y un reordenamiento que dejó ganadores y perdedores.
KARINA MILEI MARCA EL LÍMITE
El mensaje de Karina Milei, dado en persona durante el encuentro político en Mar del Plata, fue interpretado como una advertencia para todos los sectores. La funcionaria pidió evitar nuevas fracturas, mantener la disciplina partidaria y respetar la conducción nacional. Su orden terminó convirtiéndose en la llave que congeló momentáneamente los desplazamientos internos.
Sin embargo, la foto final dejó en claro que el motor real de la nueva etapa de LLA en Buenos Aires es Pareja. Él retuvo la vicepresidencia, colocó a su hombre de confianza en la conducción de la Cámara y consolidó una mayoría propia dentro del bloque.

La convivencia entre Romo y Pareja se sostiene, por ahora, en un pacto frágil. El tuitero conserva el cargo que quería para no quedar expuesto en la perdida de poder, pero lo hace bajo la tutela del armador bonaerense. Y mientras Romo intenta demostrar conducción, Osaba empieza a operar desde un rol institucional clave que redefine el peso interno de cada sector.
Lo que dejó esta pulseada es claro: Karina Milei evitó una ruptura inmediata, pero el parejismo dio un paso firme para transformarse en la fuerza dominante dentro del mapa libertario bonaerense.

