El Papa Francisco saliรณ al cruce del protocolo antipiquetes implementado por el gobierno a travรฉs de su ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, criticando duramente las medidas que buscan reprimir manifestaciones en lugar de promover la justicia social. Francisco destacรณ que el gobierno optรณ por el uso de la fuerza en lugar de abordar las causas subyacentes de las protestas sociales.
FRANCISCO ALUDIร AL GAS PIMIENTA
Durante un encuentro con movimientos populares en el Vaticano, el Papa hizo alusiรณn a los recientes episodios de represiรณn que ocurrieron en las inmediaciones del Congreso de la Naciรณn, donde la Policรญa Federal utilizรณ gas pimienta contra manifestantes. โMe hicieron ver una represiรณn, hace una semana o un poco menos quizรก. Obreros, gente que pedรญa por sus derechos en la calle. Y la Policรญa la rechazaba con una cosa que es lo mรกs caro que hay, ese gas pimienta de primera calidad. Y no tenรญan derecho a reclamar lo suyo, porque eran revoltosos, comunistas, no, no. El Gobierno se puso firme y en vez de pagar la justicia social pagรณ el gas pimienta, le convenรญaโ, cuestionรณ Francisco.
La crรญtica papal no se quedรณ allรญ, sino que profundizรณ en el trasfondo de la problemรกtica social. Francisco advirtiรณ sobre los peligros de la indiferencia y cรณmo esta puede llevar a la violencia. “El silencio de la indiferencia habilita el rugido del odio”, seรฑalรณ, subrayando que la falta de respuesta adecuada a las injusticias sociales no solo exacerba las divisiones, sino que tambiรฉn genera un clima de violencia verbal y fรญsica que, segรบn รฉl, puede desembocar en una โguerra de todos contra todosโ.
La figura de Patricia Bullrich, aunque no mencionada explรญcitamente por el pontรญfice, estรก implรญcitamente en el centro del debate, ya que fue durante su gestiรณn cuando se creรณ el protocolo antipiquetes, una normativa que priorizaba el uso de la fuerza policial para desalojar manifestantes y evitar bloqueos de calles.
LA VIOLENCIA PROMOVIDA POR BULLRICH
Francisco, quien siempre es un ferviente defensor de la justicia social, antes y a lo largo de su pontificado, hizo un llamado a reflexionar sobre cรณmo se abordan las demandas de los sectores mรกs vulnerables. โEl silencio frente a la injusticia abre paso a la divisiรณn social, la divisiรณn social a la violencia verbal, la violencia verbal a la violencia fรญsica, la violencia fรญsica a la guerra de todos contra todos. Ahรญ estรก la cola del diabloโ, agregรณ, en una advertencia sobre las consecuencias de no atender las demandas populares.
En su intervenciรณn, el Papa tambiรฉn puso รฉnfasis en la necesidad de fomentar la compasiรณn y el amor como herramientas fundamentales para la construcciรณn de una sociedad mรกs justa. “La justicia social, tambiรฉn la ecologรญa integral, no sรณlo se entiende a partir del amor. El derecho natural a la dignidad que merecen todas las personas, el mandato que tenemos todas las sociedades de garantizar la satisfacciรณn de las necesidades bรกsicas, la obligaciรณn universal de preservar la naturaleza para quienes vienen despuรฉs de nosotros, nada de eso surge de una ideologรญa ni de una tabla de multiplicar, sino del amor. No nos olvidemos de que sin amor somos nada”, sentenciรณ Francisco.
Este contraste entre la visiรณn del Papa y las polรญticas represivas aplicadas desde el minuto uno en que asumiรณ el gobierno de Javier Milei, promovidas por Bullrich, demarca la tensiรณn entre una visiรณn mรกs humanitaria y comprensiva de las demandas sociales y otra que prioriza el orden por encima de las causas profundas que llevan a la gente a salir a las calles.