En declaraciones a radio Mitre, Rossi reaccionó contra los cuestionamientos del arco opositor: “No admito el calificativo de pobreza a un proyecto que tiene la virtud de ser sintético e ir específicamente hacia el núcleo de la cuestión” que, a su juicio, es “defender la libertad de prensa y que todos tenga las mismas condiciones de competencia“.
“Corto no significa pobre”, insistió y afirmó que la iniciativa oficial “es importante para regular la producción del papel que tiene un fabricante monopólico en la Argentina, que es solamente Papel Prensa, y al pasar a ser una actividad regulada va a garantizar transparencia a su mercado y condiciones igualitarias para todos”.
Rossi reiteró que el motorizado por la Casa Rosada “es un proyecto muy contundente, muy claro, muy específico, que no admite lugar a dudas” y destacó que “en la síntesis está su contundencia”.
“Primero, declara de interés público la actividad; segundo, le da al Poder Ejecutivo la potestad de elaborar el marco regulatorio, el cual tiene que estar aprobado por el Congreso; tercero, se constituye una comisión bicameral de ocho senadores y ocho diputados, que tendrá la función de fiscalizar todo lo concerniente a la comercialización, producción y venta de papel de diarios en la Argentina“, resumió.