“No porque no se hayan hecho cosas, sino porque no se llegó a tener una noción de qué es lo que le pasó a mi viejo”, añadió.
A menos de una semana de cumplirse un año más de la desaparición del testigo del juicio contra Etchecolatz, la situación del caso vuelve a los primeros planos.
Para Rubén “durante todo este tiempo se investigó, pero no se llegó a concretar nada y para mí es como si estuviéramos en el primer día más allá del paso del tiempo”.
Ante los reclamos de que la causa de la investigación de López se encuentra “parada”, Rubén dijo que eso “depende del punto de vista que uno lo vea”. “No sé si está parada, no hay cosas para investigar, no aparecen pistas, no aparece algún testigo que aporte algo”, manifestó.
Sin embargo, sostuvo que todas estas cuestiones la “justicia tendría que generarlas”.
“Si bien estoy conforme con lo que están haciendo, también estoy disconforme por lo que pasa, entonces es medio ambiguo el tema”, destacó.
El día jueves de la semana pasada, el gobernador Daniel Scioli firmó el decreto 1548 por el cual elevó de 1 millón a 1 millón 500 mil pesos la recompensa a quienes aporten datos veraces y determinantes que permitan dar con el paradero de Jorge Julio López.
Par Rubén está medida es buena, dado que la solicitaron él y los familiares de López.
“Se consultó con la Fiscalía, se estuvo de acuerdo, hicimos el pedido para que se aumentara la recompensa y el gobierno de la Provincia se portó muy bien, porque lo ha resuelto en forma muy rápida”, finalizó.