Lo de Pablo Giralt en plena transmisión del Mundial de Clubes fue, sencillamente, una seguidilla de traspiés digna de estudio. No le salió una
EL GOL ‘FANTASMA’ DE PALMER
Primero, relató con épica un gol de Palmer que jamás existió: la pelota había pegado en el parante externo del arco y nada más, algo que dentro de todo le puede pasar hasta a un gran relator como él.
Minutos después, en un rapto de confusión musical, rebautizó a la cantante Tems como “Doja Cats”, mezclando artistas como si fueran figuritas.
Pero lo más tremendo estaba por llegar.
CONFUSIÓN DE CANAL, ALGO VERDADERAMENTE EXTRAÑO
En pleno entretiempo, mientras cumplía con la no siempre grata tarea de vender la programación del canal, Giralt se mandó un furcio histórico: anunció la nueva tarde de El Trece… estando en la pantalla de Telefe.
Así, sin anestesia. Dijo algo como: “Mañana empieza una nueva tarde en el Trece…” y trató de corregirse sobre la marcha, pero ya era tarde. Las redes, rápidas y feroces, estallaron.
No faltaron los tuits lapidarios: “Giralt, estás en Telefe, no en El Trece, boludón”; “Hoy se queda sin laburo”; “Duerman a Giralt como a los perros viejos”. Desde el humor hasta la crueldad, Twitter se convirtió en el lugar ideal para cebarse con el error.
La situación expone, además, un fenómeno cada vez más frecuente: el agotamiento de los relatores obligados a vender, casi sin pausa, la programación de sus canales.
Como bien decían varios usuarios, venden más de lo que relatan. Y en el vértigo de partidos, tandas y chivos, los furcios son casi inevitables.
Lo cierto es que, en menos de un minuto, Giralt pasó de relatar fútbol a convertirse en tendencia por motivos insólitos.
Y si algo quedó clarísimo es que, al menos este domingo, no brilló. Justamente, todo lo contrario. Un día 13, que sin ser martes ni viernes, el emocional relator jamás olvidara.