Vecinos del barrio San Carlos, en la periferia de La Plata, viven con miedo y bronca por un enorme pozo que desde hace meses representa un verdadero peligro para quienes circulan por la zona. El cráter se encuentra en la intersección de 137 y 39, y ya provocó varios accidentes, especialmente entre motociclistas que, al caer en la trampa de asfalto roto, terminaron con lesiones y daños materiales.

Pese a los reiterados reclamos, no hubo respuestas concretas de las autoridades y el pozo continúa agrandándose con el paso de los días, cubierto apenas por algunas ramas o trozos de plástico que los propios vecinos colocan para advertir a los automovilistas.
“De noche no se ve nada, y si no conocés la zona, caés directo”, contó una vecina que vive a pocos metros del lugar. Otro frentista relató que hace pocos días un joven en moto perdió el control y terminó en el suelo: “Por suerte no venía ningún auto atrás, podría haber sido una tragedia”.

La situación preocupa especialmente porque la calle 137 es muy transitada, tanto por autos particulares como por trabajadores que se dirigen hacia el centro de La Plata. Con las lluvias, el pozo se llena de agua y se vuelve todavía más peligroso.

Los vecinos aseguran que realizaron múltiples denuncias al municipio y también a ABSA porque aseguran que el comienzo del problema tiene que ver con el agua pero hasta ahora no hubo trabajos de reparación ni señalización adecuada. “Parece una exageración, pero estamos esperando que pase algo grave para que recién vengan”, lamentan.

