Hay muchas costumbres que definen ese sentimiento de nacionalidad, en Argentina tenemos comidas como el asado, la empanada, el vino; rituales como las juntadas de domingo o el futbol con amigos. Pero hay una particularidad que nos diferencia de la gran mayoría de los países: en Argentina usamos bidet siempre.
Es una costumbre incuestionable en nuestro país, tanto que la damos por sentado y cuando viajamos a otros lugares y nos encontramos con un solitario inodoro caemos en la desesperación o en la burla cuando vemos raros artefactos con los que intentan remplazarlo.
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Y justamente esta polémica se desató en Twitter, españoles tratando de entender cómo en nuestro país siempre utilizamos el bidet, cuando ellos tienen un artefacto similar en sus baños al que no le prestan atención.
Pero la foto de la comparación marcaba una pequeña gran diferencia, mientras que nuestro bidet tiene una lluvia desde abajo, en España el agua sale por una canilla ¿Cómo lo utilizan? preguntaron muchos usuarios de Twitter.
Lo cierto es que nadie como los argentinos da tanta importancia a este artefacto de baño. Durante la conformación de nuestro estado nacional, donde todos los ojos miraban a Europa, este elemento importado de Francia, ocupó un lugar simbólico en las casas. Representaba la capacidad de poder contar con uno, el ascenso social. La importancia no radicaba tanto por el uso, sino en el poder tenerlo.
Con los años el valor simbólico pasó a segundo plano y el bidet se tornó un elemento tan importante y de tanto uso como el inodoro, infaltable en la mayoría de los baños.
¿Cuál es la diferencia entre el bidet europeo y el bidet argentino?
“La diferencia es que el bidet español sale de atrás el chorro de agua, el argentino de abajo” explicó uno de los usuarios del team España. Lo cierto es que la gran parte de los argentinos, que ya tienen incorporado el uso de este artefacto de baño no parecieron mostrarse muy conformes con la versión española. “El de la derecha no es un bidet” manifestó otro usuario.
La imagen es clara, y los argentinos que hayan visitado algún país europeo donde se use bidet lo afirmarán: el chorro desde atrás es mucho más incómodo e inútil para cumplir su función de higiene genital que la versión argentina. “Jamás lo use para limpiarme, así que lo uso para llenar las botellas que en el lavabo no caben”, reconoció un usuario de Twitter español. Otros simplemente lo usan para lavarse los pies.
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