Como cada verano, el sudoeste de la provincia de Buenos Aires debe enfrentarse a la falta de agua. La situación más problemática se está registrando en la localidad de Médanos, ciudad cabecera del partido de Villarino. El intendente tuvo que salir a repartir bidones.
Según confirman fuentes municipales, las dificultades para obtener agua potale empezaron el lunes de esta semana. Los días pasaron y la escasez siguió sin resolverse al punto de llegar a los tres días sin agua. La situación “es desesperante”, sostuvieron desde la comuna que gobierna Carlos Bevilacqua.
El malestar vecinal no hizo más que aumentar y al día de hoy hay una protesta de autoconvocados prevista para el 30 de diciembre. Esto va a ser a las 9 de la mañana en la puerta de las oficinas de la empresa proveedora del servicio (ruta nacional 22 kilómetro 732). “No es política es un pueblo cansado. El agua no es un derecho es una necesidad”, reza la convocatoria que está circulando.

Por su parte, la Municipalidad está intentando asistir a los damnificados repartiendo agua. Con ese afán instaló un tanque en la peatonal de Médanos para que los vecinos se acerquen a recargar. Ayer, a su vez, el propio intendente Bevilacqua salió a repartir el líquido por los domicilios en un camión cisterna del Estado local.
El dirigente reconoce que los probelmas de abastecimiento de agua potable para consumo humano vienen de larga data. ABSA, en coordinación con su gobierno, viene haciendo obras para mejorar el servicio, pero el problema de fondo sigue presente.
La solución definitiva para la falta de agua en Villarino
Para Bevilacqua, la única forma de garantizar el servicio de agua potable en su distrito es haciendo un acueducto que vaya desde el arroyo Sauce Chico hasta Médanos para extraer el recurso hídrico, potabilizarlo en una planta y trasladarlo hasta la localidad.
Se trata de una obra de 15 millones de dólares que podría hacerse con financiamiento internacional. Desde el gobierno municipal de Villarino le confirmaron a INFOCIELO que el proyecto está terminado y que “ahora está en la etapa de decisión política del financiamiento”.

Bevilacqua se reunió esta semana con los ministros Carlos Bianco, de Gobierno, y Gabriel Katopodis, de Infraestructura y Servicios Públicos, para avanzar. “Quedamos en ver si Nación autoriza a Provincia a tomar deuda“, contó el intendente. Tras la aprobación de una ley de financiamiento, en el gobierno bonaerense temen que la administración libertaria trabe los créditos internacionales que la Provincia pueda gestionar.
Después de ese encuentro, el intendente fue a tocar la puerta de Gustavo Coria, el secretario de Interior de la Nación. “Necesitamos el OK de Nación a Provincia”, indicó el intendente que también se mostró dispuesto a aportar fondos municipales para hacer la obra.
La falta de agua que se convirtió en tragedia
La escasez de agua no solo la sufren los vecinos de Villarino sino que también se extiende hacia otros distritos de la región. Uno de ellos es Coronel Rosales donde la distribución de agua con camiones cisterna terminó en tragedia.
Según informó el medio local El Rosalenio, una mujer de 48 años se cayó del techo de su casa cuando intentaba conectar una manguera a su tanque de agua. “Se rompió la cabezam está grave, intubada, esperando cirugía y con su quimio suspendida”, le confirmaron desde el distrito a este medio.
Ante esta situación, el exintendente local, Mariano Uset, cargó las tintas contra empresa de agua y cloacas. “Mirá hasta donde llegó el desastre de ABSA, asumimos y naturalizamos su ineficiencia”, apuntó. Para el dirigente que hoy ocupa un cargo en el Ministerio de Capital Humano de la Nación, la compañía sale a cargar los tanques domiciliarios de agua “como si fuera una dádiva“.

