A través del Decreto 781/25, el Gobierno Nacional de Javier Milei bajó los aranceles a la importación de un conjunto de juguetes, como triciclos, muñecas y rompecabezas. El objetivo es “aumentar la oferta local y reducir los precios para los consumidores”, según informaron oficialmente. Reina la preocupación en la industria local.
La norma publicada en el Boletín Oficial de hoy baja al 20% los aranceles a la importación de 14 categorías de juguetes que hasta ahora estaban en 35%. De esta manera, Argentina pasa a tener la misma alícuota que el resto de los países del Mercosur. El decreto también actualizó la Lista Nacional de Excepciones al arancel del Mercosur que pasa a incluir baterías con acumuladores interconectados de hasta 18 módulos y de tensión máxima de 2.500 V por módulo.
Desde la administración libertaria señalaron que “Argentina es el país con los juguetes más caros” de la región. “Por ejemplo, el mismo modelo de muñeco transformable de una franquicia internacional cuesta $60.000 en Argentina, mientras que el precio de ese mismo juguete en Colombia es de cerca de $40.000 (33% más barato), en Brasil y Chile, $20.000 (67% más barato) y en México, $15.000 (75% más barato)”, graficaron.

Como ya hizo con otros bienes, el Gobierno Nacional busca bajar los precios en un momento de baja demanda y poca actividad industrial. Esta medida podría ser letal para los productores locales de juguetes que ya están pensando en su época del año preferida: la Navidad.
Según la Cámara Argentina de la Industria del Juguete (CAIJ), este sector genera unos 8.500 puestos de trabajo y abastece a cerca de 3.500 comercios. Se trata de un universo de 180 micro, pequeñas y medianas empresas que se ven amenazadas por un nuevo aluvión importador.



 
                                    