Pablo Laurta, detenido este domingo en Entre Ríos tras una intensa búsqueda, está acusado del doble femicidio de su expareja Luna Giardina y de su exsuegra, Mariel Zamudio, ocurrido en Córdoba. Luego del crimen, el hombre huyó con su hijo de cinco años, a quien intentaba sacar del país rumbo a Uruguay, de donde es oriundo.
La figura de Laurta no era desconocida en ciertos círculos de la derecha regional. El acusado, conocido por su postura antifeminista, fue fundador y vocero de “Varones Unidos”, una organización uruguaya dedicada a cuestionar la ley de violencia de género y a dar a conocer lo que sus integrantes describen como “falsas denuncias” contra hombres.
En ese espacio, Laurta solía hablar de la “vulneración a los derechos humanos de los hombres”, una frase que él mismo repitió durante una charla pública en Montevideo en 2018.
Activista contra el feminismo
En esa oportunidad, durante la presentación de “El libro negro de la nueva izquierda“, escrito por Agustín Laje y Nicolás Márquez, Laurta se presentó como integrante de “Varones Unidos” y explicó que su labor consistía en “generar conciencia sobre las vulneraciones a los derechos humanos de la población masculina”.
El video del evento, que se viralizó tras conocerse los hechos, muestra al acusado participando activamente del encuentro en el que Laje y Márquez abordaban “el tema de la ideología de género, el feminismo, los lobbys LGBT y cómo se articula todo ese trabajo sobre la sociedad mediante organismos internacionales, partidos políticos y universidades”.
Estas intervenciones públicas de Laurta revelaron una inserción temprana en la red de la llamada “batalla cultural”, promovida por sectores de la ultraderecha latinoamericana que hoy respaldan a Javier Milei.
“Varones Unidos”, su plataforma
“Varones Unidos” nació en 2016 como un blog y un perfil en redes sociales. Desde allí, Laurta impulsó campañas contra el feminismo y cuestionó las leyes de protección a las mujeres. En su página, el acusado llegó a publicar un artículo titulado “Cómo la justicia feminista de Córdoba mantiene a un niño secuestrado en Argentina en un contexto de extorsiones y explotación infantil”, en referencia a su hijo y al conflicto judicial con su expareja.
Durante años, esa cuenta difundió textos sobre “el caso Pedro Laurta”, en los que se sostenía que la Justicia cordobesa había “legitimado el secuestro internacional de un niño desde Uruguay”. En uno de esos escritos, el acusado afirmaba haber sido víctima de “extorsiones” y “falsas denuncias”, apuntando contra funcionarias judiciales por supuesta complicidad.
Tras conocerse los asesinatos, la cuenta de X de “Varones Unidos” fue dada de baja “por violar las políticas de odio”, en lo que se presume fueron auto denuncias de trolls libertarios para que no estuvieran disponible ñs tan fácilmente los vínculos entre el presunto doble femicida y las ideas políticas ligadas a lo que promueve el presidente.
La conexión con Laje y Márquez
Las redes sociales del propio Laurta muestran que su relación con los autores de “El libro negro de la nueva izquierda” no se limitó a una asistencia casual. En 2016 participó en la organización de su visita al Palacio Legislativo de Uruguay para la presentación de uno de sus libros. Dos años más tarde, una foto publicada en Instagram muestra al acusado almorzando con Laje y Márquez.
En 2021, Laurta también compartió un flyer que promovía un debate virtual entre Agustín Laje y la politóloga guatemalteca Gloria Álvarez, con introducción a cargo de Javier Milei. El encuentro, transmitido por el perfil del entonces diputado, se tituló “¿Pueden estar los libertarios a favor de la despenalización del aborto?”.
Ideología y crimen
El perfil ideológico del acusado se corresponde con los discursos más duros de la nueva derecha. En sus redes defiende a figuras como Donald Trump y Javier Milei, y se hace eco de campañas internacionales, como la defensa del actor Johnny Depp frente a denuncias de violencia.
“Para ‘no existir’, como dicen los abogados militantes del feminismo, las #DenunciasFalsas están apareciendo por todas partes”, escribió en una de sus publicaciones.
También Milei hablaba en contra de la denominación “femicidio” en el último World Economic Forum, sosteniendo esta teoría escrita y suscripta por Laurta, Márquez y Laje.
La investigación judicial avanza sobre el contexto del crimen y sobre el entramado ideológico que rodeaba al femicida. Según los investigadores, Laurta ya había intentado estrangular a Luna Giardina en 2022, y mantenía un conflicto judicial por la tenencia del hijo en común.
Su discurso público sobre la “persecución a los varones” parece haber funcionado como un marco de justificación de una violencia que terminó en tragedia.
El caso podría ser tomado como paradigma de cómo los discursos que relativizan o niegan la violencia de género pueden derivar en hechos concretos. En este caso, en dos vidas truncadas y en un niño que sobrevivió, de milagro, al horror.