El Club Centro Fomento José Hernández fue desafiliado por la A.F.A tras haber aprobado -casi por unanimidad- la posibilidad de que capitales externos inviertan en él. Sin embargo hasta la fecha continúan siendo una asociación civil sin fines de lucro. Christian Fernández, Presidente de la institución habló con La Cielo y brindó detalles de la situación .
¿Es posible sostener los valores sociales de un club barrial con el ingreso de las Sociedades Anónimas Deportivas (SAD)? Es la pregunta que se hacen tanto los socios, como directivos de los clubes. Y en tiempos en donde sostener una institución deportiva y social se hace cuesta arriba, desde la asamblea del Club Centro Fomento José Hernández, ubicado en avenida 31 y 511,se abrieron las puertas a “la posibilidad de que capitales externos inviertan en nuestro fútbol“.
Con aproximadamente 500 socios y 100 chicos practicando fútbol, el club barrial comunicó que “se estableció que los capitales privados que estén interesados en invertir en el fútbol de nuestro club, lo puedan hacer acogiéndose al DNU vigente (70/2023) -el DNU de Milei- y logrando una seguridad jurídica”.
Por tal motivo fue desafiliado de la Liga Costera Río de La Plata y el pasado fin de semana no pudieron participar en la competencia. “Tenemos la obligación de hacer saber a nuestros socios y a la comunidad que hasta la fecha el Club Centro Fomento José Hernández continuamos siendo una asociación sin fines de lucro. También aclarar que el club no fue privatizado, ni gerenciado y en la asamblea de socios lo que se hizo fue que la comisión directiva pueda evaluar la apertura económica a aportes externos para sostener este proyecto deficitario e insostenible para nosotros”, contó el presidente de dicha institución deportiva y social para La Cielo.
Además afirmó que “tanto el Consejo Federal como la AFA, si es que fueron los que tomaron esta decisión, incurrieron en un error importante porque la realidad es que nunca nos dieron la posibilidad de escucharnos y hubiese sido importante. Porque lo que se resolvió en nuestra asamblea es otra cosa”.
Como “Luna de Avellaneda”: cerrar o convertirlo en un casino
El financiamiento de los clubes barriales se realiza a través de la cuota social, de rifas o actividades para recaudar fondos. Pero frente a una escalada en el aumento de los servicios y el mantenimiento de estas instituciones se hace cada vez más difícil volviéndose deficitario.
Tal como cuenta la historia de “Luna de Avellaneda”, uno de los dilemas de los dirigentes y socios del club es conservar los valores y función social o reconocer que es insostenible y que quizás sea necesario acomodarse a los cambios.
“Nosotros somos un club de barrio, hacemos todo a pulmón. Los dirigentes somos todos laburantes y la realidad del país hace que sea difícil sostener una institución con más de veinte actividades, y eso hace que sea todo muy difícil de sostener teniendo en cuenta también el pago de luz y de los servicios”, afirmó Christian Fernández y continuó: “Evaluamos esta posibilidad que es legal y no le hace mal a nadie”.
Y frente a la posibilidad de que un inversor extranjero decida incorporarse, el Fernández sentenció: “El club va a seguir sosteniendo los valores sociales por lo que fue creado”.
SAD en los clubes: qué opinan los socios e hinchas
Según una encuesta realizada por Proyección Consultores, que se realizó de forma online a 1855 personas mayores de 16 años residentes del Área Metropolitana de Buenos Aires, el 77,6% de las personas encuestadas votó afirmativamente ante la consulta sobre si la AFA debería permitir a los socios de cada club decidan si quieren ser SAD.
Club y sociedades anónimas
En otra de las preguntas, le consultaron al universo encuestado si coincidían con la frase: “Con las Sociedades Anónimas Deportivas habría administraciones más eficientes en los Clubes”. El 66,4% respondió afirmativamente y se repitió la misma tendencia ante la consulta si con la SAD tendrían más oportunidades de crecimientos los clubes chicos. El 67,8% respondió que sí”.
Por su parte, Infocielo salió a hablar con los vecinos del Club ubicado en avenida 31 y 511, y hubo opiniones divididas; reconocen que es necesario inversiones extranjeras pero adviertes que puede ser nocivo para los socios.



