Estudiantes negocia con Bahía de Brasil la transferencia de Román Gómez y el nombre del club no pasa desapercibido. Se trata de una institución tradicional del nordeste brasileño, con sede en Salvador, que atraviesa una etapa de fuerte crecimiento desde su incorporación al City Football Group, el conglomerado que también maneja al Manchester City.
Bahía compite en el Brasileirão Serie A, una de las ligas más exigentes del continente, y en la última temporada logró una muy buena campaña, finalizando en la parte alta de la tabla y consolidándose como equipo competitivo. Además, fue protagonista a nivel regional, donde suele ser animador del Campeonato Baiano y la Copa do Nordeste, torneos que le permiten sostener regularidad y rodaje durante todo el año. Su entrenador es Rogerio Ceni, histórico arquero de San Pablo y la selección brasileña.

El club juega de local en la imponente Arena Fonte Nova, con capacidad para más de 45 mil espectadores, y cuenta con una hinchada numerosa y muy pasional. En los últimos mercados, Bahía apostó fuerte por refuerzos jóvenes, proyección internacional y una estructura moderna, alineada al modelo del City Group.
Pocos argentinos y un salto competitivo para Román Gómez
En cuanto al plantel, hay presencia argentina. Uno de los nombres destacados es Santiago Ramos Mingo, defensor surgido en Boca, que logró continuidad y protagonismo. La adaptación de futbolistas argentinos al club es vista como positiva, un punto que puede favorecer la llegada de Román Gómez.
Para Estudiantes, la posible venta representa una oportunidad económica y deportiva, mientras que para Gómez sería un salto competitivo importante: fútbol brasileño, exposición internacional y un club en crecimiento que combina historia, inversión y ambición. Las negociaciones continúan y Bahía aparece como un destino cada vez más firme.

