En un cruce que mezcla cine, política y raíces bonaerenses compartidas, el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger —oriundo de La Plata—, y el youtuber Jorge Pinarello, figura detrás de “Te lo resumo así nomás” (y también platense), son el eje de un contrapunto virtual que dejó al descubierto las tensiones en torno al desfinanciamiento del Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA).
Lo que comenzó como un hilo en X del funcionario, adornado con referencias a clásicos del cine argentino para justificar los recortes, derivó en una polémica que trascendió lo administrativo y se coló en el terreno de lo simbólico.
El guion de la desregulación
Sturzenegger, apodado “El Coloso” por Javier Milei, celebró este lunes la derogación de la resolución 2114/11 del INCAA, que según él imponía un “impuesto” a las salas del interior, argumentando que la medida liberaría al sector de cargas burocráticas.
Para ello, recurrió a un recurso inusual: entretejer títulos de películas argentinas como “La historia oficial“, “9 reinas” y “Cenizas del paraíso” en su narrativa, intentando vestir de cinéfilo un discurso que, en el fondo, apunta a la reducción del Estado en la cultura.
Sin embargo, el detalle que capturó la atención fue su mención directa —y en principio ambigua— a Pinarello, el youtuber platense cuyos resúmenes de películas acumulan millones de vistas.
“Te lo resumo así nomás”, escribió Sturzenegger, parafraseando el lema del canal, en un tono que muchos interpretaron como una chicana. La reacción no se hizo esperar: usuarios señalaron la ironía de que un gobierno que recorta al INCAA cite a un creador cuya labor, aunque independiente, difunde el cine nacional.
De La Plata al mundo: ¿enfrentamiento o malentendido?
Horas después, Sturzenegger publicó un segundo hilo para aclarar que su intención no era atacar a Pinarello, sino elogiarlo: “Los videos de Te lo resumo son geniales. Con mis hijos no podíamos parar de verlos hasta altas horas”, admitió, compartiendo incluso un compilado del youtuber sobre cine argentino.
La jugada, sin embargo, dejó un ‘sabor a opereta‘: mientras el ministro intentaba mostrar admiración, su gestión avanza en desmantelar un organismo clave para la producción que “Te lo resumo…” , siempre celebra.
El youtuber, por ahora, guarda silencio. Pero su figura emerge como contrapeso: desde La Plata, Pinarello construyó un imperio digital sin subsidios estatales, sí, pero su éxito no oculta que muchas de las películas que resume —desde clásicos hasta films independientes— existen gracias a políticas públicas ahora amenazadas.
Sturzenegger, también platense pero de trinchera ideológica opuesta, parece querer apropiarse de su legado para validar un modelo donde el Estado se retira, dejando la cultura librada al mercado.
La motosierra llega al cine: ¿Libertad o ajuste?
Detrás del duelo de citas cinéfilas y el falso enfrentimiento entre dos platenses, subyace una pulseada mayor: el gobierno de Milei busca presentar el desguace del INCAA como una “liberación” para el sector, pero los números desmienten el relato.
La derogación de la resolución 2114/11 elimina subsidios clave en un contexto donde el INCAA ya sufrió un recorte del 90% en su presupuesto, sumándose a una larga lista de ajustes —jubilaciones, ciencia, derechos de minorías— que priorizan el superávit fiscal sobre derechos culturales.
Sturzenegger insiste en que las salas del interior se reactivarán sin “tasas kirchneristas”, pero omite que, sin fondos para producción y distribución, el cine argentino podría reducirse a un puñado de proyectos sobrevivientes.
Mientras el ministro invoca “Tiempo de revancha” para hablar de “recuperar lo robado”, la industria recuerda que, en 2023, Argentina produjo 170 películas; un ecosistema que hoy depende de cómo resista el embate libertario, fan de “La Plata dulce”.
Pinarello: entre el elogio y la instrumentalización
El youtuber platense, cuya cuenta mezcla blockbusters hollywoodenses con joyas del cine nacional, se encuentra en una encrucijada: ¿validará, aunque sea indirectamente, la narrativa oficial que lo usa como ejemplo de “éxito sin Estado”?
Mientras Sturzenegger intenta capitalizar su popularidad, el autor de “Te lo resumo…” representa —quizá sin quererlo— la paradoja de un gobierno que recorta políticas culturales mientras aplaude a quienes, desde lo privado, llenan vacíos que el Estado abandonó.
La tensión, en definitiva, no es solo entre dos platenses: es entre dos visiones de país. Mientras el ministro celebra el “ahorro” y habla de “más cine que la gente quiera ver” —un guiño al mercado—, la comunidad audiovisual advierte que, sin INCAA, se pierde no solo financiamiento, sino diversidad. Y en medio, un youtuber devenido en símbolo sin pedirlo, cuyos resúmenes nocturnos con los hijos de Sturzenegger son, quizás, el último refugio de un cine que el propio gobierno está dejando en la penumbra.
¿Quién paga la entrada?
El INCAA no es perfecto: clientelismo y opacidad han sido sus sombras. Pero su vaciamiento no es la solución. Mientras Sturzenegger, desde La Plata hasta el poder, enarbola la bandera de la desregulación, Pinarello —sin proponérselo— le muestra que el cine argentino, incluso resumido, sigue conquistando pantallas. La pregunta es si, tras la motosierra, quedará algo más que recuerdos en formato de videos de (a lo sumo) 15 minutos.

