Una jubilada de 86 años perdió más de 4 millones de pesos en un cuento del tío en la localidad bonaerense de San Nicolás, informaron fuentes policiales.
La treta delictiva consistió en un engaño por parte de una mujer que se hizo pasar por una amiga de nombre Érica, la que le dijo a la jubilada que los billetes de los dólares iban a cambiar a color dorado.
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La anciana cayó en el ardid convencida de que para no perder debía renovar los billetes. Érica le dijo que Víctor, un amigo de confianza, pasaría a retirar los dólares por seguridad para cambiarlos en el Banco.
Así fue que en unos minutos un tal Víctor se presentó en la vivienda de la jubilada, en la calle Almafuerte, y recibió un envoltorio con 7.600 dólares.
El hombre se fue y poco después, al no retornar, la jubilada comenzó a sospechar, hasta confirmar que había sido estafada.
La denuncia por el hecho delictivo fue radicada en la DDI de San Nicolás y los detectives especializados del Gabinete de delitos por estafas, avanzan en la pesquisa.
Los investigadores analizan las cámaras de seguridad de la zona en procura de identificar al presunto Víctor y a la llamante telefónica, Érica.
El secuestro virtual de Tres Arroyos
Como se recordará, una jubilada de 70 años sufrió un secuestro extorsivo virtual en las últimas horas en la localidad bonaerense de Tres Arroyos por el que pagó un rescate de más de dos millones de pesos.
El caso de inseguridad bajo la modalidad cuento del tío sucedió en la Avenida Moreno al 1.500 cuando la mujer atendió un llamado telefónico y una voz masculina le dijo que había secuestrado a su hija.
El delincuente al teléfono, en forma intimidante, gritó que si no pagaba un rescate nunca más iba a ver a su hija con vida, por lo que la jubilada obedeció las órdenes del estafador.
El hombre le indicó a la mujer que tenía que poner sus ahorros en una bolsa y dejarla en la vereda en cuestión de segundos.
La jubilada buscó en el domicilio los dólares que tenía, y los puso en un envoltorio. Una fuente policial indicó que la mujer colocó 3.800 dólares en la bolsa, una cifra que en pesos supera los dos millones de pesos.
Ni bien la mujer dejó el dinero en la vereda se acercó un desconocido en un auto de color gris, agarró el envoltorio y se alejó del lugar.
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