En el medio de una geografía hostil deslumbra y sobresale en el corazón del conurbano, un complejo académico único en el país. La Universidad Nacional de La Matanza (UNLaM) inauguró a fines de 2019 un Centro de Simulación Clínica (CSC) para que los estudiantes realicen prácticas antes de encontrarse con pacientes en los hospitales.
Se trata de una construcción de unos 300 metros cuadrados donde se desarrollan ocho boxes, y en cada uno, los docentes pueden simular escenarios médicos para que los estudiantes realicen distintas prácticas: desde consultas médicas hasta terapia intensiva, asistencia en estado de coma o partos.
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Así es por dentro el Centro de Simulación Clínica integrado que posee la UNLaM
Las funciones de los simuladores se controlan desde un área de monitorización que se encuentra en el centro del lugar, con vista 360° a los ocho boxes. Los docentes pueden controlar sonidos respiratorios, cardíacos, parámetros, pulsaciones, oxigenación y más funciones para complejizar las prácticas.
Dichas funciones son controladas por docentes que fueron capacitados especialmente para controlar ese tipo de tecnologías. Se han capacitado con personal del país, del extranjero y realizaron cursos en Chile.
La UNLAM es pionera en la instalación de este tipo de tecnología para formación de grado en nuestro país. En el CSC pueden realizar prácticas los estudiantes inscriptos en todas las carreras que dicta esta casa de estudios superiores en el área de salud: Enfermería, Nutrición y Kinesiología, Fisiatría y Medicina.
¿Cómo funciona el Centro de Simulación Clínica?
“Esta es una actividad que realizan los estudiantes con sus docentes. Se programa todas estas actividades en la computadora y se van modificando los parámetros para que ellos vean las actividades que tienen que hacer y sus prácticas”, explicó la decana del Departamento de Ciencias de la Salud, Fabiana Lartigue.
Las prácticas que se llevan a cabo en el CSC de la UNLaM son una simulación de lo que es una guardia u hospital: los alumnos entran con ambo, guantes y mascarillas y cumplen sus funciones en los boxes.
Los primeros tres son consultorios donde se hace interacción y relación médico-paciente de las cuatro carreras. Después tienen una sala de terapia intermedia, una sala de terapia intensiva, una sala de partos, neonatología y una sala de rehabilitación.
Fabiana Lartigue, decana del Departamento de Ciencias de la Salud de la UNLaM
En cada uno de los boxes, los docentes pueden disponer diversos escenarios médicos, desde los más simples hasta los más complejos, para que sus alumnos trabajen en su diagnóstico y resolución.
Los estudiantes llevan adelante las prácticas mientras que los docentes controlan desde el área de simulación a los robots. Trabajan en conjunto, es decir, todas las salas están conectadas y monitorizadas, para luego ver los resultados y poder evaluar la actividad que realizó el alumno.
Por su parte, la decana sostuvo que “es un espacio de mucho respeto, donde los estudiantes saben que tienen que actuar como si fueran pacientes, aunque sean simuladores. Eso es lo rico que tiene esta actividad ya que es una práctica muy importante antes de encontrarse con el paciente en los hospitales”.
¿De qué se trató la capacitación?
Varios profesionales de la UNLaM fueron capacitados en Chile, donde realizaron cursos de simulación y el curso de formador de formadores. A su vez, antes del inicio de la pandemia, la Universidad tuvo representación en el Congreso Latinoamericano de Simulación, que tuvo lugar en Cancún.
Además, por el Centro ya pasaron especialistas internacionales como Peter Dieckmann, quien brindó capacitaciones a docentes de la UNLaM y de otras instituciones sanitarias que profundizaron en el uso de la tecnología y el proceso posterior a la simulación.
“Cuando se inauguró el CSC se hizo la capacitación y después vino la pandemia, quedamos capacitados, pero sin poder llevar adelante las prácticas. Recién en este cuatrimestre vamos a poder iniciar con las actividades”, sostuvo la decana Fabiana Lartigue.
Por su parte, la coordinadora de la carrera de Enfermería, Miriam López, manifestó que “la iniciativa de capacitar a otras instituciones tiene relación con que el conocimiento sea compartido” y se logre un ida y vuelta entre profesionales para potenciar cada carrera.
Así es el centro de monitorización donde los docentes modifican los parámetros de los maniquíes
Sobre el Departamento de Ciencias de la Salud
El Departamento funciona desde el año 2011 con cuatro carreras: la carrera de enfermería, que ya estaba en la universidad, medicina, nutrición y kinesiología, y fisiatría. Son la carrera de medicina y 3 licenciaturas.
Hay aproximadamente 8 mil estudiantes, distribuidos en las cuatro carreras. Ingresan alrededor de 800 alumnos por año, siendo medicina la carrera mas elegida, que cuenta con más de 300 ingresantes en 2022.
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