La cuenta regresiva hacia el verano activa búsquedas de escapadas cortas, paisajes distintos y rincones con historia para recorrer en familia. En ese mapa turístico que combina playa, naturaleza y tradición, los faros ocupan un lugar especial: no solo guiaron durante décadas a navegantes y pescadores, sino que hoy son referentes culturales y símbolos de cada localidad costera en territorio bonaerense.
En la provincia hay faros centenarios, torres metálicas traídas desde Francia, estructuras enclavadas en bosques de acacias y otros levantados en medio de reservas naturales únicas. Todos tienen algo en común: ofrecen una postal inconfundible del Atlántico y funcionan como puntos perfectos para una excursión diferente durante el verano.
A continuación, un recorrido por los cuatro faros más emblemáticos de la costa bonaerense y todo lo que hay que saber antes de visitarlos.

Faro Punta Médanos (Partido de La Costa)
Inaugurado en 1893 y declarado de interés histórico municipal, el Faro Punta Médanos es uno de los más reconocidos de la región. Su torre metálica troncopiramidal de 59 metros, traída desarmada desde Francia, se levantó a 500 metros de la línea de mareas altas y todavía hoy está habitada por torreros.

Ubicado sobre la Ruta Provincial Nº 11, entre Mar de Ajó y Pinamar, marca la culminación sur del cabo San Antonio, un punto clave para la navegación desde el siglo XVI. Incorporado al Sistema de Faros Centenarios por la Ley 26.650, también fue señalizado con el Emblema Azul de la Convención de La Haya por su valor cultural.

Además de su historia, el entorno de médanos y su casona circular en la base lo convierten en uno de los faros más fotogénicos de la costa.
Faro Querandí (Villa Gesell)
A 30 kilómetros al sur del centro de Gesell y a pocos metros del mar, el Faro Querandí se levanta en el corazón de la Reserva Natural Municipal. Su luz —que alcanza los 65 metros— es visible a 18 millas de la costa, pero su rasgo más distintivo es el paisaje: dunas inmensas, un bosque de acacias y un ecosistema único que se extiende a lo largo de 21 kilómetros.

El faro, Monumento Histórico Nacional e integrante del Sistema de Faros Centenarios, está administrado por el Servicio de Hidrografía Naval. Puede visitarse, aunque por disposición de la Armada no está permitido subir.

La reserva, a su vez, es uno de los atractivos naturales más importantes del litoral bonaerense. Allí conviven especies autóctonas, aves migratorias, zorros grises, gatos monteses, tucu-tucus y hasta la lagartija de las dunas, declarada Monumento Natural. También tiene un sendero ecoturístico autoguiado ideal para recorrer temprano en la mañana o al atardecer.
Faro Claromecó (Tres Arroyos)

Con sus 54 metros de altura y sus 278 escalones, el Faro Claromecó es el segundo de estructura cerrada más alto de Sudamérica. Funciona desde 1922 y se ubica a dos kilómetros del balneario, sobre tierras donadas por la familia Bellocq.


Es uno de los faros más visitados de la provincia por su ascenso —permitido según disponibilidad del Servicio de Hidrografía Naval— y por la vista deslumbrante que alcanza casi 50 kilómetros mar adentro. En su base, además, se conservan los restos óseos de una ballena, el único esqueleto expuesto de este tipo en el país.



Durante la Guerra de Malvinas, su altura permitió captar transmisiones británicas, un dato histórico que lo volvió aún más emblemático para la comunidad.
Faro Recalada a Bahía Blanca (Monte Hermoso)

El faro más alto del litoral marítimo argentino se encuentra en Monte Hermoso. Se inauguró el 1° de enero de 1906 y alcanza los 67 metros de altura, con sus características franjas rojas y blancas. Es, además, la torre abierta más alta de Sudamérica.


Diseñado con estructura metálica desmontable de origen francés, fue fundamental para guiar a los barcos que ingresaban a la Ría de Bahía Blanca en tiempos en que el puerto de Ingeniero White crecía como nodo estratégico para el comercio nacional.

Si bien hoy el ascenso está restringido por razones de seguridad, el exterior y el predio que lo rodea —donde funciona un pequeño Museo Naval— siguen siendo uno de los paseos infaltables de Monte Hermoso y Sauce Grande.


Preguntas frecuentes sobre los faros bonaerenses
¿Se pueden visitar todos los faros?
La mayoría pueden visitarse desde el exterior. El ascenso depende de la habilitación del Servicio de Hidrografía Naval. En Faro Querandí y Faro Recalada está prohibido subir.
¿Hay que pagar entrada?
No. Los faros no cobran entrada, aunque algunas reservas naturales pueden solicitar registro o control de acceso.
¿Puedo ir con mascotas?
En el Faro Querandí y su reserva está prohibido el ingreso con mascotas. En otros casos depende de la normativa local.
¿Cómo llegar a cada faro?
- Punta Médanos: Ruta 11 entre Mar de Ajó y Pinamar.
- Querandí: por la playa desde Mar Azul (Calle 47).
- Claromecó: a 2 km del centro, camino al arroyo.
- Recalada: camino costero hacia Sauce Grande, a 3 km de Monte Hermoso.
¿Cuál es el más alto?
El Faro Recalada, con 67 metros.

