El escándalo con los exámenes de ingreso al sistema nacional de residencias médicas sigue haciendo mella en el Gobierno Nacional. La semana pasada volvieron a evaluar a los 117 aspirantes que habían obtenido resultados sospechosos y “ninguno pudo revalidar la nota”, según informó el vocero presidencial, Manuel Adorni, en conferencia de prensa. Ahora, decidieron pasarle la pelota a las provincias.
“Esta fue la última camada de médicos cuyas becas de residencias fueron financiada por Nación. A partir de ahora los exámenes los toman y financian las jurisdicciones“, anunció Mario Lugones, el ministro de Salud de la Nación. Fue en el marco del Consejo Federal de Salud (COFESA) que volvió a reunirse ayer y junto a representantes de casi todas las provincias del país.
De esta manera, a partir de 2026, cada jurisdicción va a tomar el examen de ingreso al sistemas de residencias médicas que quiera. Para el ministro Lugones “esto permitirá procesos más transparentes y adaptados a cada sistema de salud, respondiendo a sus particularidades epidemiológicas, geográficas y sanitarias“.
Algunos funcionaros, como los de Córdoba y Salta, se mostraron de acuerdo con la iniciativa. También hubo ausentes como el caso del ministro de Salud bonaerense, Nicolás Kreplak. El funcionario estuvo en Brasil por un viaje oficial que lo llevó a Brasilia y Río de Janeiro. Lo cierto es que la provincia de Buenos Aires ya tiene su propio sistema de residencias para el que toma los exámenes de ingreso correspondientes.
En definitiva, el anuncio de Lugones parece un nuevo intento de la administración libertaria por eximirse de responsabilidades. De hecho, el propio ministro de Salud marcó ayer que “según la Constitución Nacional, las provincias son responsables de la política sanitaria en sus territorios“. Con este argumento decidió que “también lo deben ser la formación profesional de sus equipos de salud”.