Los intendentes del PRO decidieron no correrse un milímetro de sus pretensiones iniciales y sepultaron la posibilidad de aprobar el pedido de endeudamiento por 53 mil millones de pesos, realizado por Axel Kicillof, con el fin de conseguir oxigeno financiero para afrontar compromisos inmediatos en materia salarial. A falta de pocos días para el recambio parlamentario y con las sesiones preparatorias previstas para la semana que viene, la aprobación de la toma de deuda en el actual ejercicio financiero parece casi imposible: “No prospera el proyecto” reconoció un dirigente del centenario partido.
Frente a una postura más dialoguista de sus pares de la UCR , aceptaban que la Provincia achique las deudas a las comunas con un pago inmediato de alrededor de 7200 millones, – la mitad del monto total y acordar un cronograma de pagos-, los jefes comunales amarillos se mostraron intransigentes y pusieron como condición sine qua non el desembolso inmediato de los recursos para saldar el pasivo.
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“Primero tienen que pagar lo que deben, sino es una joda” lamentó un importante jefe comunal del PRO ante la consulta de INFOCIELO.
El énfasis está puesto en que, según expresan, se trata de deudas “con orden en tesorería” que incluso se retrotraen al mes de agosto.
“A mí me deben cerca de 500 millones en tesorería y lógicamente eso deberían pagarlo sin ninguna contraprestación porque es parte del fondo municipal de infraestructura ya firmado y ejecutado” completa uno de los Jefes Comunales.
“Austeridad y reducción de gastos”: los gestos que el PRO pide a la provincia
De manera paralela, otro nudo del conflicto para los intendentes del PRO se centra en la “falta de información” sobre la ejecución presupuestaria de la gestión de Axel Kicillof y en la ausencia de un esquema de “austeridad” en la planta política de cara al segundo mandato.
“Primero hay un tema conceptual, y es que la provincia debería ordenar sus cuentas, bajas cargos políticos” advierte un intendente del PRO. En la misma línea, se pronunciaron senadores de Juntos por el Cambio en un reciente comunicado: “No se ha diagramado un programa de reducción de gastos y de austeridad en pos de resolver los desequilibrios presupuestarios . Por ese motivo tampoco se conoce la verdadera necesidad de aumentar la deuda de la provincia” señalaron.
Y completan: “No se dio a conocer información actualizada sobre la ejecución presupuestaria y la ejecución de la deuda. Nos imposibilita saber, como oposición si realmente Axel Kicillof tenía realmente necesidad de tomar un nuevo endeudamiento” machacaron.
La bajada de línea PRO y una ingenuidad que le costó caro a la UCR
Según pudo saber Infocielo, el titular del Foro de Intendentes de la UCR, Maximiliano Suescun (Rauch) tenía avanzadas las negociaciones con el oficialismo y hasta el compromiso de Axel Kicillof para la cancelación de deudas si garantizaba el quórum en el Senado.
En esa dirección, buscó interlocutores con suerte dispar. Un ok dentro de la estructura bonaerense del PRO, llevó a los radicales a entusiasmarse y pensar que la negociación estaba encaminada. Sin embargo, un llamado tumbó todo. El macrismo salió a jugar de lleno y abortó toda posibilidad de entendimiento.
La postura de rebeldía del PRO frente a la premisa conciliadora de los alcaldes de la UCR comienza a resquebrajar la unidad de Juntos en la provincia, pese al blindaje que intentaron sellar alguna de sus figuras frente al escenario de fractura nacional que detonó el pacto entre Mauricio Macri y Javier Milei. “Quieren exterminar a la gestión de Kicillof” confiesa, con asombro, un experimentado dirigente boina blanca.
“Los intendentes radicales estaban de acuerdo, los del PRO después hicieron un zoom y dijeron que no, decían que no alcanzaba la propuesta”, señaló a INFOCIELO un experimentado hombre de la UCR, quien consideró que “Si nos hubiésemos sentado, era una ruptura total”.
En ese marco, se realizó este jueves en La Plata una cumbre entre intendentes y legisladores del centenario partido. Desde ese sector incluso advierten cierta “obstinación” para poner palos en la rueda a la gestión bonaerense aún a riesgo de asfixiar las finanzas en sus propios distritos.
Haciendo malabares para no perder el equilibrio político y sostener la unidad de Juntos, pese a las diferencias a la vista frente a sus pares del PRO, el radicalismo bonaerense decidió trabajar en una suerte de “mesa política permanente” para coordinar acciones de cara a las agitadas negociaciones que se avecinan. “No hemos tomado aún ninguna definición” aclaran pero afirman que la UCR será oposición tanto en la provincia de Buenos Aires como en la Nación.
“Esto es dinámico. El foro sigue trabajando y cuando entren las leyes que tienen que entrar las discutiremos entre legisladores y los intendentes” advirtió el senador Agustín Máspoli en una conferencia de prensa. En ese sentido, afirman que habrá “nuevas oportunidades” en el corto plazo ligados al presupuesto y la Fiscal e Impositiva donde podría nuevamente introducirse una propuesta de endeudamiento.
Sin embargo, el mapa de poder no augura un trámite sencillo con la irrupción de los legisladores liberales: “Debería tratarse todo junto y con los nuevos actores. Pero tienen que pagar lo que deben” retrucan desde el PRO.
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