El presidente Javier Milei será uno de los oradores centrales del America Business Forum (ABF), el encuentro global que reúne a referentes de la política, las finanzas y el deporte en el Kaseya Center de Miami. Su disertación está prevista para las 17.45 (hora argentina) y podrá verse en directo desde el canal de YouTube del evento y medios asociados.
Esta será la primera aparición pública del mandatario argentino en su nueva gira internacional, acompañado por su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, el ministro de Economía, Luis Caputo, y el canciller Pablo Quirno.

Un foro con poder financiero y simbólico
El ABF, que este año trasladó su sede desde Punta del Este a Miami, tiene una inversión estimada de 15 millones de dólares y el respaldo del fondo soberano de Arabia Saudita (PIF). Participan figuras como Donald Trump, Lionel Messi, la Premio Nobel de la Paz 2025 María Corina Machado, el CEO de JP Morgan, Jamie Dimon, y hasta el actor Will Smith, entre otros.
El objetivo declarado del foro es ser “la cumbre de las ideas más grande del planeta”, en palabras de su organizador Ignacio González Castro, aunque la verdadera clave está en el vínculo directo con las élites económicas y políticas globales que buscan invertir o incidir en América Latina.
Qué busca Milei en Miami
El paso de Milei por Miami se inscribe en una estrategia más amplia de reposicionamiento internacional. Después de meses de tensión con líderes europeos y organismos multilaterales, el presidente busca reafirmar su alineamiento con Estados Unidos y, especialmente, con el universo ideológico de Donald Trump, a quien admira abiertamente.
Aunque esta vez no habrá foto conjunta —por cuestiones de agenda—, el simple hecho de compartir foro con el expresidente republicano es una señal política clara hacia los mercados y hacia su electorado local, que asocia a Trump con el éxito del outsider que desafía al “establishment”.
En paralelo, la exposición internacional de Milei también tiene lectura interna. En momentos en que enfrenta resistencias dentro de su propio gabinete y críticas por los efectos sociales del ajuste, el mandatario busca reinstalar el relato del liderazgo global: el economista que habla en los grandes foros y recibe elogios de las potencias.
Su equipo lo sabe: cada gira exterior refuerza el personaje presidencial más que la gestión doméstica. Y en un contexto donde la economía real no muestra todavía señales de recuperación, el escenario internacional funciona como una vitrina de validación.
Próximas escalas y mensaje político
Tras su paso por el foro, Milei viajará a Nueva York, donde visitará nuevamente la tumba del Rebe de Lubavitch, Menachem Mendel Schneerson, líder espiritual al que suele atribuir su éxito electoral. Luego participará de una reunión con empresarios del Council of the Americas, en la que podría coincidir informalmente con Trump.
Antes de regresar al país, pasará por La Paz, Bolivia, para asistir a la asunción del nuevo presidente Rodrigo Paz Pereira, lo que también refuerza su apuesta por un reordenamiento regional más conservador y liberal en lo económico.
El mensaje que Milei intentará proyectar desde Miami no se agota en su discurso de 45 minutos: es parte de una construcción política global en la que el presidente argentino busca posicionarse como voz del libertarismo en América Latina y referente de una derecha que combina retórica antiestatal y networking financiero. Un modelo de poder que no necesita traducción simultánea.

