La vicepresidenta de la Nación, Victoria Villarruel, disparó munición pesada al expresar su descontento y apuntar directamente contra la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, tras la detención del gendarme Nahuel Gallo en Venezuela hace 11 días. En medio de crecientes tensiones internas dentro del Gobierno, Villarruel afirmó que nunca habría autorizado el viaje del suboficial de gendarmería al país liderado por Nicolás Maduro.
El incidente desató una ola de comentarios y críticas, impactando de manera significativa en la política argentina. Villarruel utilizó la red social X (antes Twitter) para manifestar su opinión tras una consulta de un usuario sobre el caso. En su mensaje, expresó su desacuerdo con la decisión de permitir el viaje de Gallo a Venezuela.
El fuerte mensaje de Villarruel
“Jamás habría autorizado a un gendarme a ir a Venezuela”, publicó Villarruel, quien también señaló que, aunque no forma parte del área de seguridad, considera que lo ocurrido era “la consecuencia tristemente obvia”. La vicepresidenta agregó que no emite juicios sobre las sanciones o medidas a tomar, pero calificó el viaje del gendarme como una decisión equivocada. Este comentario alimentó las tensiones internas en el Gobierno, dado que responsabilizó directamente a la gestión de Bullrich, quien hasta el momento no ha respondido públicamente a las acusaciones. Aunque posteriormente Villarruel eliminó la respuesta, cientos de usuarios vieron la interacción, siendo objeto de críticas por parte de los seguidores más fieles del Gobierno Nacional.
Lo cierto es que los chispazos con su propio Gobierno datan desde hace rato, al punto que el propio Javier Milei aseguró que la Vicepresidenta “se encuentra mucho más cerca de la casta” y que por eso no forma parte de la mesa chica ni de la toma de decisiones. Con Bullrich, el distanciamiento data desde casi el inicio del Gobierno libertario, cuando la ex candidata del PRO se quedó con el área que más deseaba Villarruel, quien quedó rezagada a la presidencia del Senado de la Nación.
Repercusiones del caso del gendarme
El ministro de Relaciones Exteriores, Gerardo Werthein, también se refirió al caso, desmintiendo las afirmaciones del gobierno venezolano. Según Werthein, el gendarme Nahuel Gallo no es un espía, como había asegurado Diosdado Cabello, ministro de Relaciones Interiores, Justicia y Paz de Venezuela. Werthein explicó que Gallo viajó a Venezuela para visitar a su novia venezolana y cruzó la frontera desde Colombia de manera legal, utilizando su pasaporte. Además, calificó la detención como una acción injustificada.
“La verdad es que Cabello no dice la verdad. Este es un joven gendarme con una hija argentina de 2 años y una novia venezolana. Fue a visitar a su familia tras obtener permiso y al cruzar la frontera fue detenido de manera injustificada”, declaró Werthein en una conferencia de prensa. Además, el canciller aseguró que Gallo está siendo retenido en condiciones de “rehén” por el régimen de Maduro.
A pesar de los intentos por aclarar los hechos, la situación sigue generando incertidumbre en el ámbito político argentino. Las críticas de Villarruel a Bullrich han intensificado las divisiones dentro del Gobierno. Mientras tanto, el debate sobre la responsabilidad de permitir que un miembro de las fuerzas de seguridad viaje a Venezuela se ha convertido en un tema central, con los funcionarios gubernamentales divididos respecto a las medidas a tomar.