La investigación contra el abogado Nicolás Payarola, detenido desde hace casi tres semanas en una celda policial de Pacheco, sumó un capítulo decisivo: Wanda Nara fue citada a declarar como testigo en el expediente que lo señala por múltiples estafas que superarían los tres millones de dólares y que involucran a más de una decena de víctimas.
La citación fue firmada por el fiscal Cosme Iribarren, titular de la UFI de Benavidez, quien instruye la causa desde hace más de un año. El funcionario judicial sostiene un voluminoso cuerpo de pruebas, entre ellas documentación secuestrada durante los allanamientos a los domicilios de Payarola, en los que surgieron referencias directas a la conductora e influencer. En su propia indagatoria, el imputado había solicitado que Nara fuera convocada.
Iribarren buscará determinar si Wanda aparece en el expediente como damnificada en las maniobras o si pudo haber intervenido en algún tramo de las operatorias bajo investigación. Además, intenta precisar una versión reciente que indica que Payarola mantendría una deuda con la empresaria de, al menos, 300 mil dólares. Si Nara no se presenta el lunes 15, el fiscal podría ordenar su traslado compulsivo mediante un patrullero.
LA HIJA DE POSSE VS WANDA NARA
La denuncia más sensible contra la conductora es la presentada por la abogada y concejal de San Isidro, Macarena Posse, hija del exintendente Gustavo Posse. Posse aseguró haber trabajado como patrocinante de Wanda entre enero y abril de este año en los expedientes vinculados a su divorcio de Mauro Icardi. Según su presentación, ambas partes habían acordado un convenio que incluía una cláusula de revocación anticipada: en caso de que Nara diera de baja el patrocinio dentro del año, debería abonarle 600 mil dólares.
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“La razón de esa cláusula era la exposición, el tiempo, la dedicación, la cantidad de expedientes y el seguimiento casi permanente de la clienta”, explicó Posse en la denuncia. El patrocinio fue revocado en abril, pero —siempre según la abogada— Wanda no cumplió con el pago pactado y luego dejó de responder sus reclamos. Posse también afirmó que tanto Nara como Payarola habrían evitado sistemáticamente formalizar la firma del convenio pese a haber acordado los términos en una serie de chats aportados a la causa.
La investigación también incorporó nuevas víctimas en las últimas horas. Un joven representante de influencers, de 18 años, denunció que Payarola lo convenció de crear una empresa con la promesa de trabajar para figuras como Wanda y L-Gante, pero que finalmente lo estafó y le hizo perder 20 mil dólares. En paralelo, la dueña de una clínica de estética declaró que el abogado le aseguró una inversión en un fideicomiso y terminó despojándola de 200 mil dólares.
Mientras tanto, Sofía Ferrarazo —pareja de Payarola y también imputada— fue indagada por tres hechos. Negó todas las acusaciones y continúa en libertad. Este miércoles visitó al abogado por primera vez desde su detención.
