¿Se puede rescatar de una derrota? Claro que es posible sacar conclusiones positivas aun después de un golpe. En Gimnasia, por ejemplo, quedó en claro que un futbolista que merece sostenerse en cancha pensando en lo que viene: Bautista Merlini.
Determinante por las búsquedas para romper líneas con pases, el Mago Merlini ofreció versatilidad para moverse tanto en zona media -arrancó como interno- como así también por la izquierda y las bandas y hasta en rol de pivote defensivo por momentos (no tanto para marcar, sí para recibir y ser pase claro en la salida).
Los datos que reflejan su buen partido
En un Guillermo Laza en el que la fajina es obligatoria, además, Merlini respondió siendo el segundo jugador de campo que más duelos disputados (13) acumuló, detrás de Alexander Díaz (15). Y todo esto sin fallar en los toques: apenas erró seis de 60 en una cancha en la que entregar con precisión es prácticamente imposible por lo cortado del partido.
Con seis encuentros disputados en el Clausura (el primero como titular, ante Riestra) dependerá de Alejandro Orfila si sigue sumando minutos (lleva 223’ en este torneo) en una zona en la que a Gimnasia le falta un revulsivo pensante.
Que tenga gol (aunque no convirtió en el campeonato, sí tiene llegada al área: le marcó a Español por Copa Argentina) o que los genere. Con 30 años recién cumplidos, el #8 está en su prime.
El Chano Orfila, entonces, podría aprovecharlo para que el Lobo resurja. Y que así, los puntos necesarios para escaparle a las tablas reaparezcan para terminar de generar alivio. ¿Puede ser con algo de magia?
