La tardecita del viernes fue un desquicio informativo. De repente, la posibilidad de que Marcos Rojo termine en Gimnasia desorientó a propios y extraños, teniendo en cuenta la identificación que el jugador tiene con Estudiantes más allá de lo que piense un sector de los hinchas.
El asado en la casa de Lucas Castro con publicación en redes sociales incluida hizo mucho ruido, y lo que pudo empezar como una broma al paso en una reunión social, se transformó rápidamente en rumor, y luego en una espiral mediática de alcance nacional desopilante, en la que un supuesto convite para que el ex jugador de Estudiantes se ponga la azul y blanca terminó por revolucionar el final de la semana.
Mientras define su futuro y se entrena a contraturno en Boca, Rojo atendió a este medio y dejó en claro su postura: “Es ridículo lo que se está publicando. No hace falta ni aclarar que jamás jugaría en Gimnasia”.
Una foto, un asado y el posible regreso a Estudiantes
Luego de la foto en cuestión en la que estaban Israel Damonte, Pablo Lugüercio, Marcos Rojo, Mariano Andújar, Pata Castro, Pablo De Blasis, Lautaro Formica (cuñado del ahora ex volante del Lobo) y Emiliano Méndez, el viernes estuvo picante. Trascendidos múltiples, reclamos, explicaciones y un rumor bomba: la supuesta invitación de Lucas Castro a que Rojo juegue en Gimnasia. Y más: la información daba cuenta de un supuesto análisis de Marcos, y hasta una comunicación con Mariano Cowen en la que se hablaba del hipotético contrato.
“Pasa que el jueves me junté con los pibes en la casa del Pata a comer asado y subimos una foto. Pero de ahí a inventar esa boludez… Jamás jugaría en Gimnasia”, dijo Rojo el viernes a última hora cuando fue consultado por la información que empezaba a circular con la misma virulencia con la que escalaba la indignación del jugador y su entorno.
Rojo tiene una amistad con los jugadores y ex jugadores con los que posó en la foto. Y en este momento de mercado de pases, con su futuro en Boca indefinido, no lo sorprende que a esta altura ya lo hayan vinculado a muchos clubes, pero en el mismo contacto con Cielosports.com deslizó una sugerente frase que confirma todo lo que este medio vino adelantando, y que su entorno ya no disimula: “todos saben cuál es mi deseo”.
Con Corbalán de entrada y cinco cambios: Orfila pateó el tablero para recibir a Central
El deté metió mano y cambió medio equipo. Es la segunda vez consecutiva que hace al menos cuatro cambios para intentar torcer la historia.
Es más, la representación del ex defensor de la Selección Argentina, ya rechazó, o al menos las congeló, ofertas de Independiente, Racing, Newells, y otros clubes del exterior (el rumor de que pudiera ir a Inter Miami con Messi siempre estuvo presente) con el propósito de priorizar el deseo de MR16 de tener la revancha con la que sueña en Estudiantes. De hecho, Rojo ya se encargó de hacerle saber su intención a quienes toman decisiones en Estudiantes, y hasta habría mantenido contactos con José Sosa y Guido Carrillo, los referentes del plantel, para manifestarles su deseo y sondear la posible recepción del plantel.
Mientras define su futuro contractual en Boca, ya que el futbolístico hace rato está resuelto, Rojo hace todo lo que tiene a su alcance para volver a vestir la camiseta de Estudiantes, aun cuando sabe perfectamente que su primer desafío será volver a seducir a un sector de los hinchas que se resisten. Un desafío que lejos de frenarlo, lo motiva. Quizás, la derrota a manos de Vélez en la final de la Supercopa Internacional, y la viralización mediática del viernes por la noche, aceleren una resolución que por ahora tiene final abierto…
