Diferentes agrupaciones y autoconvocados de las facultades de la Universidad Nacional de La Plata (UNLP) se hicieron presentes esta tarde en la ciudad de La Plata en la Marcha de Antorchas: “Para muchos estudiantes es su primera experiencia política, es una coyuntura que ha obligado a pibes que tienen 20, 22 años a participar de una marcha, una asamblea, una toma de facultades”, sostuvo Fabiana Diluca, docente de la Facultad de Artes de la UNLP.
Con carteles llamativos confeccionados por ellos mismos, trompetas y redoblantes, una multitud marchó desde la Avenida 7 de La Plata. Algunas de las consignas que se hicieron presentes son: “Conocimiento por y para el pueblo”, “Cara es la ignorancia” y los cánticos: “Si el presupuesto no está, qué kilombo que se va armar”, de los estudiantes de la Facultad de Psicología.
“No es la primera vez que se sale a la calle”
De cara al paro de este jueves 17 de octubre, la docente Diluca contó en diálogo con Infocielo: “Siempre la marcha, como las tomas y los paros, ha sido una herramienta histórica de la universidad en La Plata y en todos lados, esto no es nuevo, lo que sí es nuevo -que hablábamos ayer con compañeros-,es que para muchos estudiantes es su primera experiencia política, es una coyuntura que ha obligado a pibes que tienen 20, 22 años a participar de una marcha, una asamblea, una toma de facultad”.
En relación al discurso que apunta a que hasta este año nadie salía a marchar, la docente manifestó acerca de su recorrido universitario: “No tengo la cuenta, pero te podría decir que mis primeras marchas son del 95, contra la ley de Educación Superior y la Ley Federal de Educación, muchísimas marchas en esos años y después en 2001, las tomas”.
“La facultad de arte estuvo tomada cuatro meses y dabámos clases en las tomas además de en las marchas, todos los viernes teniamos marchas de antorchas. En ese momento produciamos -así como ahora hacemos carteles- muñecos, máscaras, carteles, entre alumnos y docentes para llevar a la marcha, y en muchas de ellas esos muñecos se quemaban, por ejemplo. Después en 2008, en el primer marzo del Macrismo hubo cuatro marchas educativas, sólo en un mes, en 2018 y ahora otra vez”, recordó Deluca.
Universidad para todos los pueblos
Chi’iñay Kallpa pertenece a la comunidad Ayllu mayu wasi, y es estudiante de la Tecnicatura de Cultivos Protegidos y Ambientes Controlados en la Facultad de Ciencias Agrarias y Forestales: “Nos encontramos acá para representar a los Pueblos Indígenas en la urbanidad, en Buenos Aires, acompañando siempre la educación pública libre y gratuita”, contó.
Con la wiphala en mano explicó: “Para nosotros la wiphala no es una bandera, sino es un símbolo que une a todos los pueblos preexistentes, originarios, y es muy importante porque -en estos tiempos donde no se nos reconoce o se nos trata de seguir escondiendo- es una forma de decir que acá estamos presentes, nos representa como indígenas originarios. Es muy importante poder visibilizarnos en estas marchas y en todo como pueblo”.