Estudiantes jugará ante Racing para definir el Torneo Clausura. En Santiago del Estero habrá clima de final. Y también agobiante: el Servicio Meteorológico Nacional anticipa una máxima superior a la de un día previo inclemente para quienes tenían que andar en saco y corbata.
La jornada del sábado ya provoca que la del viernes quede en los libros como de invierno. Después de una jornada cuya máxima alcanzó los 33°C -y una sensación térmica de 35.9°C– para el día del partido se prevén 35°C como pico, aunque el registro de sensación térmica ya es superior en dos grados.

A eso hay que sumarle la bajísima presión que hay en Santiago: promediando la tardecita del viernes era de 980 hectopascales. Como para dimensionar lo pesado que estuvo, el parámetro normal a nivel del mar es de 1.013 hPa. Eso genera que se intensifique el denominado estrés térmico: malestar, deshidratación y golpes de calor, especialmente por la absorción del sol por asfalto y edificios que liberan calor.
Para atenuar los efectos de las altas temperaturas, en el estadio Madre de Ciudades se colocaron ventiladores king size para refrigerar y generar alivio en quienes se encuentran al ras del campo de una infraestructura que quedará algo reparada del sol gracias a su techado parcial. Eso permitirá que el cemento no acumule calor.
La final entre Estudiantes y Racing se disputará este sábado desde las 21. Para esa hora se prevé una temperatura de 30°C aunque con un 51% de humedad. Está claro que sí o sí se hará un minuto de descanso para que los futbolistas se refresquen.
El pronóstico del SMN


