Nacho Fernández se transformará en el transcurso de horas en refuerzo de Gimnasia: el volante quedará oficialmente libre de River el 31 de diciembre a la medianoche y tendrá la posibilidad de firmar su nuevo contrato con el club que dejó en 2015. Una década después, el regreso se hará efectivo.
Ahora bien: ¿cómo llega Nacho Fernández? Multicampeón con el equipo de Núñez en dos ciclos -ganó siete títulos con Marcelo Gallardo entre 2015 y 2021; levantó otros tres con Martín Demichelis entre 2023 y 2024- su última temporada fue tan irregular como el rendimiento del cuadro que integró hasta hace unas semanas.

A los 35, Nacho está pleno. Aun sin la continuidad de otras temporadas y arrancando buena parte del año como alternativa, en 2025 redondeó una actuación de 32 partidos (promedio de 48’ por encuentro). Y en ese intervalo marcó tres goles y concedió dos asistencias. Es decir que participó de un grito cada 307’.
Con Gallardo, su nivel de influencia fluctuó en el marco de un constante recambio de dibujos y nombres: en lo único que fue regular River en 2025 fue en su crónica irregularidad. Y Fernández lo pagó. Aunque cuando le tocó ingresar aportó pases claros, movilidad y un rasgo importante: tendencia a ser siempre un compañero del volante central para, desde ahí, generar juego.
Por qué además vuelve siendo líder

Desde su paso por Atlético Mineiro (temporadas 2021 y 2022 completas), Nacho Fernández le sumó voz de mando a su estilo. Un ejemplo que lo marcó en el Galo fue en 2021, cuando durante la Copa Libertadores fue crucial para que el árbitro anulara vía VAR un gol de Boca (Diego González). En aquel encuentro, ya como capitán de su equipo, se negó a sacar del medio insistiendo en un chequeo que finalmente acabó en la no convalidación de ese grito del Pulpo.
Ya con las despedidas consumadas en River, incluso a través de las redes, el crédito de Dudignac descansa mientras su agente terminar de cerrar los documentos con GELP. Adonde eligió volver, como tenía planificado desde que por primera vez emigró del CARP hacia Brasil. Todo estaba pensado. Y ese deseo se volverá realidad.
¿Y Casco? ¿Cómo llega?
La situación de Milton Casco es diferente a la de Nacho: en el caso del lateral, relegado por un titular que a la vez se afianzó con temperamento y carácter (Marcos Acuña, campeón del mundo), durante su año el defensor tuvo menos participación que en temporadas anteriores.
A los 37 años, Milton jugó 20 partidos durante 2025, con dos asistencias en su haber. Aunque regresará, de prosperar la negociación, como un futbolista mucho más completo: ambidiestro -a punto tal que íntimamente en River lo consideraban el jugador más técnico del grupo- fue capaz de moverse como lateral por ambas bandas e incluso como doble cinco por su facilidad para la lectura de juego.

