Con un mensaje político que combinó gestión, federalismo bonaerense y críticas al Gobierno nacional, el gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, encabezó este martes la entrega de 132 viviendas destinadas a familias de los municipios de Tandil y Ayacucho.
Acompañado por la ministra de Hábitat y Desarrollo Urbano, Silvina Batakis, y por los intendentes Miguel Ángel Lunghi (Tandil) y Emilio Cordonnier (Ayacucho), Kicillof remarcó que la iniciativa es una muestra concreta de que la cooperación institucional está por encima de las diferencias partidarias. “Más allá de cualquier diferencia ideológica, lo verdaderamente importante es trabajar juntos en favor de los intereses de las y los bonaerenses”, afirmó el mandatario, y remarcó que el Gobierno provincial mantiene una política de diálogo abierto con todos los jefes comunales, sin distinción de signos políticos.
En ese marco, el Gobernador puso el foco en uno de los problemas estructurales más sensibles del país: el acceso a la vivienda. “En la Argentina existe un problema muy serio de acceso a la vivienda y el Estado no puede mirar para otro lado”, sostuvo, al tiempo que aclaró que las casas entregadas no son un regalo, sino una política pública que permite a las familias pagar sus viviendas en condiciones y plazos que el mercado inmobiliario no ofrece. La definición no fue casual y se inscribió en una defensa explícita del rol regulador del Estado frente a la lógica de mercado.
La escena no fue solo de gestión. En momentos en que el Gobernador impulsa el armado de su espacio Movimiento Derecho al Futuro con proyección nacional, el encuentro con el intendente radical Miguel Ángel Lunghi funcionó también como una señal política: ampliar consensos, tender puentes por fuera del peronismo y construir acuerdos en base a políticas concretas. En ese marco, la agenda de vivienda y obra pública aparece como un terreno común para articular con dirigentes de distintos signos partidarios.

Gestión provincial y mensaje político en el interior bonaerense
Las 66 viviendas entregadas en Tandil están ubicadas en el barrio Villa Alegre y fueron construidas en conjunto con la Asociación Civil Corazón Tandilense, mientras que las 66 adjudicadas en Ayacucho corresponden al complejo habitacional “Papa Francisco”. Ambos proyectos incluyen infraestructura básica completa: red de agua, gas, cloacas y energía eléctrica, un dato clave en términos de calidad de vida y planificación urbana.
Por su parte, Batakis destacó la magnitud del plan habitacional bonaerense y lo contrastó con el escenario nacional. “Nunca antes la Provincia había contado con un plan de más de 8.000 viviendas en ejecución”, señaló, y precisó que 1.500 casas fueron adjudicadas solo en lo que va de este año. Para la ministra, la política habitacional es una de las prioridades estratégicas de la gestión Kicillof y una herramienta concreta para ampliar derechos en un contexto económico adverso.
El intendente Lunghi, referente histórico del radicalismo en Tandil, valoró el acompañamiento provincial y dejó una definición con fuerte contenido político. “Cuando Nación excluye al gobernador de la provincia de Buenos Aires se está dejando de lado a la mitad de la Argentina”, advirtió, y reivindicó el diálogo como condición indispensable para el desarrollo.

La agenda del Gobernador incluyó además un capítulo vinculado a la seguridad. Junto al ministro Javier Alonso, Kicillof puso en funcionamiento cuatro nuevos patrulleros para reforzar la prevención del delito en Tandil y entregó certificados a efectivos de Tandil y Ayacucho que completaron la Diplomatura Universitaria en Gestión de la Seguridad Rural. Alonso fue contundente: “Sin inversión pública no hay seguridad posible”, y marcó diferencias con la política nacional en la materia.
Hacia el cierre, Kicillof volvió a endurecer su discurso contra el Ejecutivo nacional al denunciar la “asfixia económica” que, según afirmó, sufre la Provincia. Sin embargo, ratificó el rumbo de su gestión: “Vamos a seguir trabajando para que haya más educación, más salud, más seguridad y más vivienda”. En un mensaje de balance y proyección, el Gobernador dejó en claro que, pese al contexto adverso, el Gobierno bonaerense buscará profundizar una agenda centrada en la ampliación de derechos y la presencia del Estado en los 135 municipios.

