Luego de su alejamiento del inconcluso albertismo, y tras la presentación de su herramienta electoral “La Patria de los Comunes”, los movimientos sociales del oficialismo cerraron filas con el gobernador Axel Kicillof, a quien esta tarde pusieron en el centro de la escena durante un acto organizado por Barrios de Pie en Ensenada.
“Axel es quien mejor nos representa para dar la pelea, y aguantar lo que nos digan y hace falta“, sintetizó el referente de Barrios de Pie, Daniel Menéndez, ante la militancia que colmó el predio del Sosba con pancartas y cánticos que pedían por su reelección.
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Al convite asistió además el secretario gremial de la UTEP y dirigente del Movimiento Evita, Gildo Onorato, para certificar que la apuesta electoral de los movimientos sociales es una realidad, al menos en casi una veintena de municipios bonaerenses donde apalancan candidaturas propias.
“Este plenario es la reafirmación de que los barrios populares quieren acompañar al gobernador por la reelección”, expresó Onorato al abrir el acto desde el escenario, para luego bajarse del mismo y darle lugar a Kicillof, Menéndez y la diputada Natalia Souto.
No sin incomodidad, en tanto que una de las internas más importantes se da en La Matanza -donde el Evita promueve la candidatura de Patricia Cubría frente al oficialismo de Fernando Espinoza y su vicegobernadora Verónica Magario-, Axel Kicillof devolvió el saludo: “Cada vez que nos encontramos, fue luchando y resistiendo al neoliberalismo; y nos encontramos gobernando a favor de las mayorías populares, cuando gobernaron Néstor y Cristina”.
La no mención a Alberto Fernández en el “gobierno de las mayorías” podrá creerse adrede, aunque cabe decir que la militancia irrumpió en canto cuando el gobernador mencionó a Néstor y Cristina. En todo caso, Kicillof buscó sintonizar con la “frustración” de “gran parte de la militancia” frente a la inestabilidad actual, según señaló Menéndez.
Una referente de Barrios de Pie de Esteban Etecheverría resumió a este cronista dicho sentir: “Los merenderos antes eran dos, tres veces en la semana, y ahora es casi todos los días. Ya no solo vienen los chicos sino que ya viene un grupo familiar a buscar la comida”, indicó al mismo tiempo que alertó por cómo Javier Milei “pega muy fuerte en las juventudes”, en particular sobre los “jóvenes que no han vivido el 2001”.
Es por ello, además, que Axel Kicillof centró su discurso en las consecuencias de “las políticas neoliberales de los 90´”, habló de la desocupación y el impacto de la crisis de 2001, para dar paso luego a sus actos de gobierno.
Por su parte, en diálogo con INFOCIELO, Daniel Menéndez reiteró el “entusiasmo” por la figura de Kicillof, y contó que “hace un tiempo que venimos discutiendo en asambleas, en cada una de las secciones electorales, lo que se juega este año. Y coronar el proceso de discusión con el gobernador nos deja en claro el horizonte, la necesidad de retener la provincia y frenarle el paso a la derecha, y hacerlo con propuestas”.
“La mejor manera de discutir en un escenario donde la política tiene dificultades para interpelar a la sociedad, donde muchos de quienes nos acompañaron no ven realizados los anhelos por los que nos votaron en 2019, hay mucha militancia que se arma de paciencia, que recibe muchos cuestionamientos, pero en otra parte acompaña porque ve la transformación de la provincia“, aseguró.
En ese línea, Menéndez ponderó la gestión de Kicillof frente a la “desidia” de su predecesora, y afirmó: “Ha sido un cambio enorme y profundo en la provincia que necesitamos continuar, en un contexto donde las exigencias del FMI, el ordenamiento de la derecha con propuestas cada vez más desintegradoras del tejido social, requiere que estemos fuertes y que haya mucha militancia social”.
-Hay un consenso unánime bajo la figura de Axel Kicillof en la Provincia, de sindicatos, movimientos sociales. ¿Qué ocurre en el plano nacional y hacia dónde apunta el movimiento?
-El tema nacional hay discusión, hay claramente procesos de debate interno respecto de si conviene o no una PASO, si hay candidatos únicos, quién es esa o el candidato que va a terminar sintetizando las propuestas, parece que lo que nosotros entendemos es que necesitamos mayor cohesión y construir los mecanismos que puedan consolidar un volumen político que nos permita dar la pelea que es crucial.
No tiene que faltar nadie en esa toma de decisión, y tiene que haber una síntesis con mayor consenso respecto a cómo resolver de cara a la sociedad, quién nos va a expresar electoralmente el proyecto de país.
En ese marco, nosotros ponderamos que haya un proceso de acuerdos mínimos, tanto desde el candidato único como si se define finalmente que haya un proceso de internas, y que nos permita ganar volumen y discutir el riesgo que implica que en la Argentina gobierne la derecha con las propuestas que expresan y, sobre todo, porque es un proceso político que va a generar inestabilidad. Nosotros tenemos claro que la inestabilidad en nuestro país no es algo que le haga bien a los sectores populares, porque están precedidas políticas económicas que van a ser de mucha angustia, que van a traer mucho dolor y que seguramente no se van a consolidar sin un proceso de represión que bueno, de solo pensar, uno lo lleva a hacer todos los esfuerzos para evitar que pueda acceder al gobierno.
–Presentaron la herramienta electoral, La Patria de los Comunes, ¿Qué función va a tener?
-La función es expresar el torrente de militancia social que existe en los movimientos populares, en una construcción que tiene más de 20 años de existencia en el país, que se consolida en cada uno de los pueblos y las ciudades, con búsqueda de expresar debates en cada uno de los territorios para oxigenar y renovar la representación política en los distritos, desde abajo. Creemos que hay que avanzar en proyectos de ciudades donde expresen la participación de los movimientos populares, y estamos muy convencidos y entusiasmados con el proceso que se abre a partir de esta herramienta, tanto para renovar la representación política como para ampliar la base de sustentación del Frente de Todos.
-Las referentes barriales describían que en los merenderos y comedores, si antes iban tres veces a la semana, ahora están yendo todos los días. ¿Cómo militan un oficialismo en esta situación?
-Con paciencia, escuchando, receptando el dolor, mucha frustración en una parte de la militancia, pero inmediatamente después, cuando uno contiene, escucha, recibe… quizá mucha militancia recibe cuestionamientos sin ser responsable de los límites que hemos tenido como gobierno. Pero es importante y central poner la cara para contrarrestar la permanente andanada de mensajes que lanzan desde los medios de comunicación concentrados. Nuestra militancia es muy sabia y tiene mucha capacidad de dar los debates y avanzar desde la paciencia y el acompañamiento, en convencer y volver a enamorar si quienes tienen responsabilidad en la conducción de nuestro espacio tienen la suficiente capacidad para poder construir un proyecto que enamore.
Nosotros tenemos claro los límites que significó que el FMI gobierne la Argentina, que esté condicionando las acciones de gobierno; lo que quiere imponer cada vez que se da un proceso de discusión, y esta situación requiere de mucho poder político y de mucho trabajo sobre nuestro pueblo para poder construir alternativas, y en ese contexto es clave dar esas peleas, y obviamente reconstruir esperanzas.
Tenemos primero la conciencia fresca de lo que fue el gobierno de Juntos por el Cambio, tanto de Macri como de María Eugenia Vidal; por eso, allí no va la cierta disconformidad de lo que hemos vivido en estos tiempos. Y obviamente discutir en términos de las ideas que propone Milei, el abismo al que nos convoca.
-Hablaste de conducción, ¿qué te pareció el discurso de Cristina Kirchner en el Teatro Argentino?
-Me parece impecable, hay que sacarlo de la discusión electoral chiquita, nos convoca a una batalla cultural profunda del enraizamiento que tienen las ideas liberales de Milei, y dar un debate profundo respecto de cómo cerrarle el paso a esas ideas y ese proyecto que se está construyendo.
-¿Le hizo un guiño a la candidatura de Sergio Massa?
-Bueno, está claro que fue un acuerdo que Sergio Massa conduzca el proceso económico, hay un reconocimiento pleno de aceptar esa convocatoria en un escenario tan complejo, y obviamente en un marco en donde hay una enorme fragilidad macroeconómica. Consensuar la firmeza con la que hay que discutir con el Fondo en este tiempo, para evitar concesiones que nos quieran imponer, y para construir a la vez estabilidad cambiaria, que es indispensable para que no haya golpe de mercado ni proceso devaluatorio. Me parece que detrás de ese consenso, hay un acuerdo muy claro en la conducción económica de Massa.
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