Antes de comenzar con el ciclo de Alejandro Orfila en Gimnasia, Jan Hurtado fue noticia en el Lobo por una acción solidaria que tuvo para con un excompañero. Y es que el venezolano aprovechó sus últimos días de descanso para decir presente en el centro deportivo Pelota al Pie, el cual comanda Patricio Monti en Los Hornos.
El hoy por hoy mediocampista de Centro Fomento, en La Liga Amateur Platense, fue quien dio a conocer el encuentro a través de las redes sociales del complejo de formación profesional para futuros futbolistas. En la publicación se lo puede ver al propio Hurtado realizando diferentes movimientos ofensivos y compartiendo su tiempo también con aquellos que sueñan con dedicarse al fútbol.
Tras la visita, desde el centro deportivo compartieron el siguiente mensaje: “¡Nos visitó un gran delantero del fútbol argentino, jugador actual de @gimnasia_oficial y la selección @selevinotinto ! Tuvimos el honor de recibir en nuestro centro de entrenamiento a @jancarloshurtado , jugador de fútbol profesional, que vino a entrenar con nosotros y compartir su energía y compromiso”.
“Nos llena de orgullo que deportistas de alto nivel confíen en nuestro espacio para seguir creciendo. ¡Gracias por elegirnos, Jan! Seguimos trabajando para ser el lugar donde el esfuerzo se convierte en resultados”, cerraron.
Días atrás, el propio venezolano también había dicho presente en el entrenamiento de la Reserva de Gimnasia. Esa visita fue reflejada tanto por Nicolás Barros Schelotto como por Francisco Paradela en sus redes sociales, dejando en claro la buena onda existente entre el delantero del primer equipo y varios de los juveniles del Mens Sana.
Patricio Monti en Gimnasia: de la Liga Amateur al vínculo con Maradona
Patricio Monti dio sus primeros pasos como futbolista precisamente en Centro Fomento, donde se desempeña actualmente. En mayo de 2018, tras haber llegado a Gimnasia tiempo atrás, tuvo su estreno como profesional. Fue en el empate 2 a 2 ante Independiente en Avellaneda, donde Hernán Darío Ortiz le brindó la chance.
Si bien nunca pudo establecerse de manera concreta en el primer equipo del Lobo, en el que jugó apenas siete partidos, sí supo dejar su particular sello por la relación especial con Diego Maradona. Primero con un rap en homenaje al Diez y luego con un tremendo tatuaje que generó emoción incluso en sus hijas.