Quedan apenas horas, nada más, para que La Plata se paralice. Para que el Clásico de la ciudad genere esa adrenalina única que se transmite en esta clase de encuentros. Que generan muestras de cariño, de empuje. Como lo demostró la gente de Gimnasia: este sábado en Estancia Chica hubo pogo, bengalas de humo, trapos y mucho aliento para los futbolistas en la víspera del derbi.
Es tan cierto que GELP no viene bien, que la permanencia no ha dejado todavía de ser una preocupación, que el equipo viene de perder a su entrenador (fue cesado Alejandro Orfila) y que Fernando Zaniratto dirigirá interinamente. Pero los Clásicos Platenses son fechas aparte. Un torneo en sí mismo dentro del Clausura.
Y por eso los hinchas se agolparon en el complejo donde el plantel trabaja, el búnker en el que se craneó cada detalle para el mano a mano de este domingo a las 15 en estadio UNO. Impactante. Tanto que tanto el entrenador como los futbolistas capturaron imágenes que transmitieron en vivo o post filmación en sus cuentas de Instagram. Único.
